Pocas veces hemos visto molesto a Miguel Ángel Mancera, Jefe de Gobierno de la Ciudad de México. La suspensión definitiva que dictó un juez en materia administrativa para detener las obras del Metrobús en Paseo de la Reforma, provocó que el gobierno capitalino mostrara su brazo. En declaraciones que dejaron con el ojo cuadrado a más de uno, Mancera dijo: “soy respetuoso de las instituciones, pero todo tiene un límite. Vamos a ir de la mano con ese litigio, pero si tengo que mover algo, quitar algo para beneficio de la gente, no me importa que nos amenacen con que nos van a denunciar que violamos suspensiones, yo tengo que ver por el beneficio de la gente. Además, lo voy a hacer yo”.
Con esta posición Mancera lanza dos mensajes muy claros: que seguirá en el camino de concluir la construcción de la línea 7 del Metrobús y que en su carrera hacia la Presidencia de la República tiene la suficiente fuerza y energía para defender sus proyectos. El Jefe de Gobierno les advirtió a los grupos que se oponen al Metrobús en Reforma que él tiene todas las argumentaciones para defender y continuar con la obra.
Para solidificar su postura, en un comunicado conjunto entre el Instituto Nacional de Antropología e Historia y el Gobierno de la Ciudad de México, afirmó que Paseo de la Reforma es una avenida emblemática, de aporte histórico y cultural y un espacio de encuentro social. Ambas instituciones se comprometieron a preservar el entorno histórico de la Calzada de los Misterios y el Bosque de Chapultepec. El Instituto Nacional de Antropología e Historia aseguró que el Gobierno de la Ciudad de México cuenta con el permiso para continuar la obra, autoriza el cambio de la carpeta asfáltica en el carril confinado que usarán los autobuses de doble piso e instalará mesas técnicas de perfeccionamiento del proyecto y generará un programa de rescate integral de Paseo de la Reforma. Victoria redonda para los negociadores: Héctor Serrano, Secretario de Movilidad; Edgar Tungüí, Secretario de Obras y Servicios; Guillermo Calderón, director del Sistema Metrobús y Manuel Granados, Consejero Jurídico capitalino. Con todo lo anterior, es cuestión de días para que se reanuden las obras para hacer la entrega en tiempo y en forma.
Corazón que sí siente
Miguel Ángel Barbosa, ex perredista, hoy senador por del PT, ya se pasó de la raya. Se le ocurrió decir que Juan Zepeda, candidato del PRD al gobierno del Estado de México, está mejor posicionado que Miguel Ángel Mancera para la candidatura del Sol Azteca en 2018; de inmediato le reviró Héctor Serrano, Secretario de Movilidad. En su posición perredista de base, le dijo a Barbosa que no tiene calidad moral para opinar sobre las candidaturas del Partido de la Revolución Democrática, y le recordó que está donde está gracias al PRD. Le callaron la boca a Barbosa y le recordaron que no debe morder la mano que le dio de comer.
Columna anterior: Incongruencia