Varios niños que eran llevados a la frontera de Tamaulipas, para recibir su vacuna contra el coronavirus, se llevaron un susto al poncharse las llantas del autobús que lo traslada por culpa de artefactos arrojados por un presunto delincuente.
Los hechos ocurrieron en la carretera La Ribereña, donde el autobús de pasajeros pasó por artefactos conocidos como "ponchallantas" que supuestamente fueron tirados por un sujeto tras registrarse una persecución con policías estatales.
La situación de riesgo se presentó cuando el civil armado a bordo de un vehículo Nissan Sentra abrió fuego contra los policías estatales, desatándose una persecución que terminó con el civil lesionado.
Tras caer a un canal, fue detenido y se le decomiso de un arma de fuego y ponchallantas, aunque alcanzó a arrojar algunos que fueron los que daño el autobús donde iban los niños.
FOTO: Especial
La línea de autotransportes Transpaís activó el protocolo de emergencia y los menores fueron resguardados por policías estatales que custodiaban las unidades.
El informe de la Secretaría de Seguridad Pública indica que policías estatales hacían recorrido de vigilancia sobre la carretera cuando a la altura del Ejido Argüelles municipio de Díaz Ordaz hicieron alto al conductor de un automóvil, el cual no sólo no se paró sino sacó un arma corta y disparó contra los policías.
Varios minutos después, indica, pasó un convoy de camiones que sufrieron ponchaduras por los artefactos que quedaron sobre la carretera, sin ninguna otra afectación.
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