Los presidentes del Senado y la Junta de Coordinación Política, Eduardo Ramírez y Ricardo Monreal, respectivamente, recibieron al gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, para tratar la denuncia que presentó el mandatario estatal por supuesta intromisión del crimen organizado en las elecciones de junio pasado en territorio michoacano.
Aureoles entregó a los senadores morenistas una copia de su denuncia, así como un documento con varias propuestas legislativas, primero para tipificar el terrorismo electoral como un nuevo tipo de delito federal, además de incentivar a que se lleven a cabo elecciones con urnas electrónicas para evitar irregularidades.
Al concluir el encuentro, el gobernador de Michoacán dijo en conferencia de prensa que ni el ni su familia han recibido amenazas por el crimen organizado debido a su campaña en la que ha acusado que su estado se encamina a un narco gobierno, encabezado por Morena.
“Regresará a Michoacán el narco gobierno porque se metieron los grupos criminales a obligar a la gente a votar por Morena y sus candidatos. Morena ganó 15 distritos locales de 24; 8 de 12 distritos federales; de 112 ganó 70 municipios; y para gobernador hay una diferencia de dos puntos”, indicó.
Incluso mostró pruebas de algunos municipios donde Morena arrasó y los demás partidos sacaron cero votos. “En una casilla metieron todo un block completo en una urna con votos para Morena”, ahondó.
Aclaró que no está dolido ni está litigando la elección, sino que a Michoacán no tiene que regresar el narco gobierno.
Adelantó que hoy mismo acudirá a la Fiscalía Especializada en Delincuencia Organizada para presentar denuncia sobre delincuencia organizada en su estado.
“Si seguimos así, el próximo Presidente de la República lo va a imponer el narco y crimen organizado”, externó.