Vestidos de negro, madres y padres de pacientes con cáncer infantil protestaron en el Monumento a la Patria de Mérida para exigir abasto de medicamentos oncológicos, y le recalcaron al Gobierno federal que no son “golpistas”, únicamente quieren quimioterapias para sus hijas e hijos.
Aclararon que el desabasto de medicamentos inició desde antes de la pandemia y que aún prevalece en el hospital estatal Agustín O'Horán y en la Unidad Médica de Alta Especialidad del Seguro Social (IMSS).
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La señora Ali Isabel Pérez Mena, cuya hija de 13 años padece leucemia, recalcó que se sienten tristes, dolidos y frustrados, no sólo por la falta de atención por parte de las autoridades federales, sino porque los han ofendido tildándolos de perseguir intereses “golpistas” y de la derecha.
“Obviamente hay papás molestos, son sentimientos encontrados, pero la mayoría siente tristeza porque aparecen diciendo que somos golpistas, nos desacreditan. Eso nos dolió mucho, parece que no le interesamos al gobierno, no se preocupa”, lamentó.
En el caso de su hija, relató que tuvo que pedir apoyo a la sociedad yucateca para juntar dinero para que pudieran realizarle un trasplante en un hospital privado y, finalmente, el IMSS no quiso subrogar la operación.
“Todo lo justifican con la pandemia, por eso no la quisieron operar. Además está el problema de la falta de quimioterapias o de los estudios clínicos, que son muy caros. Cada caso es diferente, depende del diagnóstico de sus hijos, pero todos los gastos para pacientes oncológicos son muy costosos”, recordó Pérez Mena.
En la protesta, la señora María Guadalupe Sánchez Sánchez pidió al gobierno y a la sociedad ponerse en su lugar en vez de acusarlos de golpistas, pues recalcó que su hijo de 10 años requiere medicinas para poder vivir y por eso demandan que se solucione la crisis de desabasto.
“Mi hijo tiene cáncer en los linfomas, cada 15 días necesita tratamiento. Si no lo recibe, pierde fuerzas, ya no tiene ánimos, es como si el medicamento fuera su energía para seguir con vida”, abundó.
Dijo que desde hace dos años enfrentan este problema de escasez, por lo que lamentó que de nada sirve pagar la cuota de trabajador al IMSS si no no le pueden dar un procedimiento adecuado a su hijo.
“Hay un tratamiento que cuesta como 35 mil pesos, yo no tengo ese dinero, por eso recurro a fundaciones para que me brinden el apoyo”, explicó.
La protesta se realizó de forma pacífica en el Monumento a la Patria de Paseo de Montejo, desde donde exhibieron cartulinas en las que pedían quimioterapias para sus hijos.
Por Herbeth Escalante
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