Una de las festividades más antiguas del estado de Colima es la de “Los Chayacates”, la cual se lleva a cabo los días 5 y 6 de enero en el municipio de Ixtlahuacán.
Esta celebración es resultado del sincretismo de las creencias cristianas y la cosmovisión de los aborígenes mexicanos.
Quienes participan en ella, recolectan con anticipación un fruto conocido como Chocohuistle que produce la planta Aguama, la cual se encuentra en el campo del lugar, y simboliza la producción de trigo en Belén.
Durante la celebración un grupo de cuatro viejos, que representan los cuatro puntos cardinales, se vistan de ixtle y acapán, así como de cueros de tejones, y luego recorren el pueblo en busca del camino que los llevará al pesebre, en el que nacerá el niño Dios.
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El objetivo es protegerlo del Rey Herodes, quien de acuerdo con la Biblia intentó matar al niño Jesús y al no encontrarlo, mandó a asesinar a todos los bebés en Belén.
Durante su recorrido, estos cuatro hombres deben buscar provisiones y luchar contra los demonios que buscan impedir que lleguen a su destino.
Acto seguido, miden el terreno donde sembrarán y cosecharán el maíz, y junto con los Reyes Magos, la Virgen María y José, aguardan por el nacimiento del niño Jesús.
Finalmente, ayudan a la santa familia a escapar de Herodes, así que cuando el rey llega a ese lugar, los Chayacates son asesinados, al negarse a dar información.
Esta celebración guarda ciertas similitudes con las pastorelas e integra diversos elementos cristianos, como la adoración a la Virgen.
brc