La escultura de una mujer indígena, entre muros de piedra antiguos, con utensilios tradicionales para moler semillas y chiles, recuerda cómo se elabora una pasta que sirve para preparar el mole, un platillo de la época prehispánica que es común en Veracruz y otras regiones del país.
A su alrededor, hay recipientes con formas y tamaños diversos. Algunos están llenos de distintos tipos de chiles: unos secos y otros recién cortados de las matas; en los demás tazones hay pepitas de calabaza, cacahuates y otras semillas.
Sobre las paredes lucen imágenes de los chiles serrano, de árbol, chilaca, pasilla, guajillo y manzano, pero se destaca que la mayoría de los moles actuales llevan cuatro chiles principales: ancho, mulato, pasilla y guajillo.
Se trata del Museo del Mole, ubicado en el municipio de Coatepec, a 10 kilómetros de Xalapa, mismo que es considerado el único de su tipo en la República Mexicana y en Veracruz.
Al frente, hay un fogón improvisado con piedras y leña, con un comal encima donde se observan tomates verdes, jitomates y chiles toreados, características de una cocina tradicional de antaño.
La mujer viste prendas típicas. Lleva una blusa blanca con ligeras costuras color violeta en el contorno del cuello y mangas. También una falda larga, color rosa mexicano, con flores bordadas en la cintura y un cordón azul.
De los muros también cuelgan tazas, platos y otros trastos de talavera y barro, donde se lee la historia de los moles novohispanos, los rasgos de la cocina conventual y las leyendas del mole poblano.
“Cuenta la leyenda que en un convento poblano se planeaba un banquete para el obispo Juan de Palafox (1600-1659). Cuando fray Pascual estaba cocinando, llegó el diablo y con su larga cola tiró los chiles, especias y bizcochos en la manteca donde se freían unas piezas de guajolote. Después de mucho maldecir, fray Pascualillo probó el guiso resultante y pidió mil perdones al Altísimo, ya que no fue la cola del diablo sino el aleteo de un ángel el responsable de tal acto. El fraile espolvoreó ajonjoli tostado para presentarlo al obispo, quien encantado con el platillo se chupó los dedos”, se explica.
Al fondo hay varios utensilios que facilitaban la actividad de la industria del mole. Hay básculas de diversos tamaños y formas, también pailas, freidoras, tostadores, trituradores, molinos y batidoras.
HISTORIA DEL MOLE EN COATEPEC
En la entrada principal hay un arco amplio, dentro de un restaurante denominado Casa Mercado, un importante atractivo turístico en el Pueblo Mágico.
Está en la esquina de las calles de Segunda de 5 de Mayo y Enríquez, a sólo dos cuadras del parque Miguel Hidalgo y Costilla y de la parroquia de San Jerónimo.
Rodolfo Hernández, director general de Mole Castizo, recuerda que la historia del mole en Coatepec empieza hace 80 años, con su abuela paterna.
“Fueron los primeros pasos que ella dio en el tema de hacer un mole en pasta. Ella era de Ixhuacán de los Reyes, un pueblo cercano. Se da un proceso familiar y hace 26 años mi papá muere y nosotros, mi hermano, mamá y yo, empezamos con el tema de Mole Castizo. Hicimos el museo porque vimos la necesidad de contar la historia personal pero también decir que Coatepec también es mole”, enfatiza.
ESCENARIO NAVIDEÑO
Coatepec es una de las cuatro sedes del programa Orgullo Navideño, que se lleva a cabo del 30 de noviembre al 9 de enero.
A unos metros del Museo del Mole, por primera vez será instalada una pista de hielo que estará abierta al público de manera gratuita; otras tres serán habilitadas en Cosamaloapan, Coatzacoalcos y Papantla.
Se busca la reactivación económica en las distintas regiones de Veracruz, luego de la crisis derivada de la pandemia por SARS-COV-2 (COVID-19).
De acuerdo con el secretario de Gobierno, Eric Cisneros Burgos, los ayuntamientos y el sector empresarial destinaron recursos económicos para esta iniciativa turística; la administración estatal solo apoyó en la logística.
Serán cerradas las principales calles del Centro Histórico del Pueblo Mágico para la instalación de un pabellón donde habrá actividades culturales y artísticas, durante los 40 días del evento.
DERRAMA ECONÓMICA
Se espera que la pista de hielo en Coatepec también reactive la economía de los municipios cercanos como Xalapa, Xico, Teocelo y otros.
Autoridades municipales estiman una derrama económica superior a los 60 millones de pesos, con la puesta en marcha del festival “Orgullo Navideño”, en su tercera edición.
De acuerdo con el presidente municipal de Coatepec, Luis Enrique Fernández Peredo, se calcula que hasta 12 mil personas visiten diariamente el Pueblo Mágico.
Por lo anterior, se ha solicitado todos los comercios, restaurantes y hoteles que acaten las medidas sanitarias para evitar contagios de coronavirus.
CAR