En caso de que se dé un caso de abuso sexual, acoso u hostigamiento dentro del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), existe un acuerdo de confidencialidad que deben firmar las personas que denuncian estos hechos, así lo deja entrever un documento que fue publicado por el medio de investigación periodística Animal Político.
De acuerdo con este documento, la víctima de estos hechos se compromete a guardar bajo secreto cualquier resultado al que se llegue durante una investigación de cualquier proceso interno; es decir, no deben mencionar nada de lo hecho en los planteles de la institución para hacer o no justicia ante estas agresiones.
¿Castigan a las víctimas?
La revictimización no termina ahí, pues en caso de que las estudiantes, profesoras, trabajadoras o cualquier miembro de la comunidad universitaria se atreva a incumplir con este acuerdo puede ser expulsada sin previo aviso o separada de su cargo.
De acuerdo con el ITAM, lo único que no permite a las personas es hacer público cualquier asunto que tenga que ver con la investigación llevada a cabo por las autoridades del colegio; sin embargo, destacó que las agredidas sí pueden hablar de sus casos y señalar a los responsables.
“Esta obligación de confidencialidad perdurará aun cuando concluya el proceso, por lo que guardaré reserva de la misma durante un periodo indefinido”.
Este extracto de la carta compromiso hace mención a que la escuela niega a las víctimas a hablar sobre el procedimiento jurídico interno sin un plazo fijo.
En el caso de las profesionales que trabajan en este centro se arriesgan a perder sus derechos laborales y a no recibir ninguna indemnización por ser despedidas.
”Estoy consciente que de incumplir las obligaciones establecidas aquí suscritas, incurriré en una falta de probidad y me haré acreedor o acreedora a una baja definitiva del ITAM, o bien a una rescisión de mi contrato o convenio de prestación de servicios profesionales”,
¿Y cómo castigan a los agresores?
Esta sanción, señala Animal Político, es mayor que la que se implementa en contra de los agresores, pues los lineamientos del ITAM implican que quien acose o violente sexualmente a otras personas dentro del plantel puede ser amonestado, suspendido provisionalmente, aunque también permanentemente
Los acusados de agresión son también sometidos a la entrega de este acuerdo de confidencialidad, el cual tiene un par de líneas en las que explica que su función es salvaguardar el prestigio de la institución.
“De esta manera, me comprometo a sacar en paz y a salvo al ITAM, así como a sus directivos, funcionarios, empleados y colaboradores de cualquier procedimiento, instancia, denuncia, queja, querella, indemnización o sanción (cualquiera que sea el nombre o denominación legal que le corresponda) que llegare a instaurarse o imponerse en caso de incumplimiento a las obligaciones de confidencialidad, sigilo y no divulgación aquí asumidas”.
Hay excepciones para el documento, las cuales implican que la escuela comprende si esta información fue filtrada sin que la víctima o agresor hayan sido responsables de comunicar estos datos.
Por: Redacción Digital El Heraldo de México
GDM
Escucha y conoce casos de feminicidios en México en Que Nadie Nos Olvide