Con puestos separados 3.5 metros entre si, y con poca afluencia de gente, la tradicional venta de flores en la capital del estado se desarrolló pese a la contingencia sanitaria por el Coronavirus.
Aunque se había informado que por las disposiciones estatales no se permitiría la típica venta de flores del Viernes de Dolores en las calles de Guanajuato, se permitió a algunos comerciantes colocarse, pero de manera separada.
Los puestos ofertaban a diez pesos los ramos de alelíes, nubes, manzanilla, espuelas, trigo e hinojo, para no arriesgarse y lograr “sacar la venta” de flores que de lo contrario se les echarían a perder.
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Los comerciantes, la mayoría productores de la flor, sufrieron la poca clientela que regularmente tapiza las calles de la capital para participar en la tradición en donde se colocan altares para iniciar la Semana Santa.
El municipio este año concentró la zona de venta en el Cantador y separaron los puntos de venta 3.5 metros en promedio e instalan filtros sanitarios en los accesos con gel antibacteriano, además de que reparten cubrebocas entre los productores.
Sin contingencia, los comerciantes se instalan afuera del mercado hidalgo y desde octubre comienzan a sembrar para esta celebración.
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Por: Gabriela Montejano
dhfm