Medios de Europa difundieron ayer que el mexicano candidato de la coalición Por México al Frente, Ricardo Anaya, es investigado por autoridades de ese continente por presunto lavado de dinero, con la que supuestamente se obtuvieron fondos para el político panista, lo que celebró Javier Lozano, el vocero del candidato de Todos por México, José Antonio Meade.
“Anaya es un capo, es un delincuente ¡por Dios!”, expresó Javier Lozano, vocero de la campaña de José Antonio Meade, candidato presidencial de la alianza Todos Por México, al explicar que “yo celebro que esto ya se conoce en Europa, y que sepamos por parte de ellos exactamente lo que pasó y de cuánto fueron las operaciones”.
Lozano, quien renunció al PAN en enero pasado, advierte que es natural que el caso haya llegado a Europa: “son tantos países por donde pasó este dinero antes de llegar a manos de Ricardo”, por lo que descarta que haya intenciones “de carácter político o de una persecución personal”, en la investigación.
“Tarde o temprano habrán de dar con toda la red y podrán desmantelar y pues podremos confirmar todas las sospechas que se han sembrado en torno a este asunto”, dijo a El Heraldo de México.Reprobó que la PGR “no tenga la objetividad de actuar según su mandato legal y profundizar en la investigación, y mandar llamar a Barreiro, al suegro de Anaya, que es el representante legal de la empresa, y al propio Anaya, el beneficiario”. A su parecer, este escándalo “en cualquier país civilizado” debería tumbar a un candidato, “pero parece que aquí en México, el fuero más potente que hay es ser Candidato a la Presidencia, se convierte en intocable, yo espero que esto se ventile a nivel internacional y que entonces se ventile toda la verdad”. Recordó, además, que “por una operación similar está en la cárcel Roberto Borge, ex gobernador de Quintana Roo”. La investigación en Europa es consecuencia de la indagatoria iniciada por la Procuraduría General de la República (PGR) al traspaso de una nave industrial por 54 millones de pesos, y se difunde en la semana en que varios sondeos colocaron a Anaya como el ganador del debate presidencial del 22 de abril pasado, en la CDMX. De acuerdo con publicaciones europeas, la línea que llevó a investigar a Anaya, fue producto de una indagatoria al empresario mexicano-español Juan Pablo Olea Villanueva, implicado en una red internacional de lavado de dinero y que, se descubrió, es el brazo derecho de Manuel Barreiro, presunto socio de Anaya en la compra venta de la nave industrial. “Se investiga la creación de una estructura financiera radicada en terceros países y paraísos fiscales a fin de obtener fondos para el candidato a la Presidencia de la República, Ricardo Anaya. Dichos fondos, previa circulación de los mismos principalmente por Canadá y Gibraltar, los habría recibido el señor Anaya mediante la venta de una nave industrial propiedad de su familia, ubicada en el estado de Querétaro a la empresa mexicana Manhattan Master Plan, por valor de 54 millones de pesos mexicanos”, publicó ayer el diario digital El Español. De acuerdo con esa información Olea es propietario de al menos 14 empresas en España, desde hostales, florerías y de bienes raíces, con las que habría creado una red de lavado de dinero que llegó hasta Querétaro, con la compañía Advance Real Estate. “Tanto Barreiro, como su socio español, Juan Pablo Olea Villanueva, son señalados como los responsables ideológicos y materiales de la creación de la estructura necesaria para lavar fondos de procedencia ilícita y transferirlos a Anaya. Al día de la fecha, ambos se encuentran investigados y sus cuentas bancarias congeladas por las autoridades judiciales mexicanas”, indica El Español. POR REDACCIÓN