CD. JUÁREZ. Tuvo que pasar año y medio para que los dos hombres compartieran la misma mesa.
Una hora antes de la conferencia de prensa matutina, Gustavo Madero y Ricardo Anaya desayunaron juntos: huevos, jugo de naranja y café fue el menú.
Madero fue el primero en levantarse y caminar hacia la salida. Detrás iba su "niño".
"Nunca hemos dejado de ser amigos", dijo el ex dirigente panista entre risas mientras abrazaba a Anaya.
Los dos llegaron juntos a la conferencia de prensa. Ahí Madero volvió a aclarar, ante la insistencia de los reporteros, que la relación con su alumno nunca se había roto.
"No tengo la menor duda de que va a ser el mejor presidente de la República porque está preparado. No engaña como Andrés Manuel", aseguró el panista que en agosto de 2016 había acusado a Anaya de haberlo traicionado, luego de que no lo nombró coordinador de los diputados de su partido.
"Tengo muchísima gratitud. Yo no estaría hoy aquí sin su apoyo y su respaldo", reconoció, en respuesta, Ricardo Anaya.El candidato del PAN, PRD y MC presentó su plan educativo y afirmó que estaba dispuesto a trabajar de la mano con el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) para lograr "una verdadera revolución educativa". Madero permaneció parado a su lado, escuchando y viendo cómo su pupilo se lanzaba en contra de Andrés Manuel López Obrador tras las discrepancias que tuvo el tabasqueño con el Consejo Coordinador Empresarial (CCE). El hijo pródigo y el Jefe Madero estuvieron todo el día juntos: se reunieron con el gobernador Javier Corral para hablar de temas locales y después acudieron a un encuentro con emprendedores juaritos, e incluso grabó con su celular, como un padre orgulloso, las palabras que el candidato presidencial decía ante los jóvenes. -¿Qué le hizo cambiar de opinión, porque hay mucha gente que se quedó con la idea de traidor?, se le cuestionó al ex líder panista. - Ricardo siempre ha hecho una lucha para lograr sus objetivos y lo estamos haciendo porque este objetivo nos envuelve a todos. Si le va bien a Ricardo, nos va bien a todos, atajó Madero. Más tarde, durante una reunión con jóvenes emprendedores en el Technology Hub, ubicado en Ciudad Juárez, Chihuahua, Ricardo Anaya celebró que la juventud se atreva a crear y sea el agente de cambio que requiere el país. POR RICARDO ORTIZ