Durante este año, los estados de la República pagarán a la banca 42 mil 134 millones de pesos por concepto de intereses, comisiones y cobros por el servicio de sus deudas.
De acuerdo con una revisión hecha por El Heraldo de México a las previsiones presupuestales de 2018 de todos los estados, esta cantidad será 13.21 por ciento superior a lo que pagaron en 2017, y que ascendió a 37 mil 217 millones de pesos.
El mercado del financiamiento subnacional es peleado entre instituciones bancarias por su gran atractivo, explicó Ricardo Gallegos, director ejecutivo senior de finanzas públicas e infraestructura en la calificadora HR Ratings.
Mientras que es un mercado de altos rendimientos, presenta pocos riesgos para la banca, la cual encuentra en estados y municipios a clientes con gran necesidad de financiamiento para infraestructura y servicios básicos, y con capacidad de pago casi asegurada año con año gracias al dinero que la Federación les aporta, refirió.
En el mercado del financiamiento subnacional hay dos bancos que destacan por su participación mayoritaria: Bancomer e Interacciones, los cuales son los prestatarios de cada 2.5 pesos y dos pesos, respectivamente, de cada 10 que los estados adeudan a la banca privada, de acuerdo con datos de la CNBV.
“Nos dimos cuenta que Interacciones era esa pieza que en estos momentos sí hace sentido. Hay mucha infraestructura que falta en el país”, platicó recientemente a este diario Marcos Ramírez, director general de Grupo Financiero Banorte, el cual próximamente se fusionará con Interacciones con el principal objetivo de aumentar su participación en el financiamiento a estados y municipios.
Sólo en 2017, la cartera de infraestructura de Interacciones creció cerca de 40 por ciento y le representó utilidades por tres mil millones de pesos, en tanto que la cartera de BBVA Bancomer llegó a un total de 71 mil millones.