El presidente nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Manuel Granados, solicitó a la Secretaría de Gobernación (Segob) protocolos de actuación en materia de seguridad tras nueve asesinatos de políticos en siete días, entre el 28 de diciembre y el 3 de enero.
En Hidalgo, donde acudió a una reunión con la estructura de su instituto político, los cadáveres del exalcalde de Mixquiahuala Miguel Ángel Licona Islas, de 76 años, y de su hijo Miguel Ángel Licona Pérez, de 41, fueron hallados en la sala y en una habitación de su vivienda en calle Leona Vicario, esquina con Allende, en el centro de la localidad, el pasado 3 de enero.
Diez horas después de que recibió notificación del hallazgo del cadáver del exedil priista, la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) descartó, en un comunicado, la actividad política como móvil del crimen contra el exmunícipe; no obstante, no argumentó el motivo por el cual desechó la hipótesis.
“Es un tema que ha lastimado a varios partidos políticos, pero principalmente al de la Revolución Democrática, con el lamentable fallecimiento de cinco compañeros en los estados de Jalisco, Guerrero, Tabasco y Baja California Sur”, expuso el líder perredista, quien añadió que la semana anterior planteó a Miguel Osorio Chong (quien renunció este día a la Segob) la necesidad de revisar los protocolos de seguridad y la coordinación institucional entre los tres órdenes de gobierno ante posibles crímenes durante el proceso electoral 2018.
Para la revisión, indicó, se requiere la participación de los partidos que contenderán en los próximos comicios.
Un día antes del asesinato del exfuncionario hidalguense, fueron ultimados el director de Protección Civil de Santiago Ixcuintla, Nayarit, Sabino Mejía, y el activista de Morena en el Estado de México, Luis Alberto Sánchez Trujano.
A estos se suman el homicidio del alcalde de Petatlán, Guerrero, Arturo Gómez Pérez y del diputado local del PRD, en Tomatlán, Jalisco, Saúl Galindo, ambos el 28 de diciembre.
Siguió la muerte del cuarto regidor del PRD de Jalapa, Tabasco, Gabriel Hernández. Mientras que el exsíndico de Ixtaczoquitlán, Veracruz, Francisco Vázquez Rojas, perdió la vida el 31 de diciembre.
Por su parte, 2018 comenzó con el asesinato de Adolfo Serna, aspirante del PRI a la alcaldía de Atoyac de Álvarez, Guerrero, el 1 de enero.
Por Áxel Chávez / Corresponsal