El gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas, canceló de forma definitiva la tala de 230 árboles en el Paseo Tollocan, para la construcción de un túnel que beneficiaría a Plaza Galerías.Y aunque no canceló el proyecto, pidió a las empresas involucradas mayor creatividad en las soluciones que ofrecen en materia de movilidad.
Así, y después de una intensa lucha de dos semanas por parte de vecinos de la zona y activistas, que no dejaron de movilizarse para denunciar el inminente ecocidio, finalmente se canceló la tala.
En el Zoológico de Zacango, donde presentó 10 logros de su administración en materia ambiental, el mandatario mexiquense también anticipó que los “equinos o burros” que se han utilizado desde hace muchas décadas para el traslado de desechos domésticos en el oriente del Estado de México (en un servicio conocido como “carretoneros”), serán rescatados y sustituidos por motonetas.
REFORESTARÁN
El Ejecutivo local también dio a conocer que este mes, dentro de la campaña anual de reforestación, se sembrarán 20 millones de árboles, que se sumarán a los 127 millones que ya se plantaron en la actual administración.
Ante ambientalistas y el director general de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, Alejandro del Mazo, el gobenador dio marcha atrás al proyecto que su propio gobierno impulsaba.
“Si ya está en revisión este proyecto, todo lo que tenga que ver con trasplantar o talar no lo vamos a permitir. Si el proyecto permite ejecutar la obra, siempre y cuando no se trasplante, ni se tale, cuentan con su amigo el gobernador, si saben contar. Si no es así, pues no cuenten conmigo”, indicó Ávila, quien sorprendió con el anuncio, que motivó un aplauso generalizado.
Por la mañana, el alcalde de Toluca, Fernando Zamora, se anticipó a la medida y anunció que cancelaba de manera definitiva el permiso que había concedido a la empresa Perinorte S.A. de C.V.. El edil se disculpó de haber sostenido en días previos que él no había dado la autorización, toda vez que el área de medio ambiente sí lo hizo, pero sin su aval.
Por María Teresa Montaño.