El robo de combustible en México genera pérdidas de entre 780 millones de dólares y mil millones de dólares anuales, señaló el Secretario de Hacienda, José Antonio Meade.
"Es un cálculo difícil de hacer, tiene diferentes vertientes y los cálculos rondan entre los 15.000 y los 20.000 millones de pesos al año", apuntó.
Dijo que ya se lanzó una estrategia para combatir los robos de combustible que incluye perseguir no sólo a los ladrones, sino también a quienes lo adquieren.
También se está investigando a gasolineras que pudieran estar comprando y revendiendo combustible ilegal, y también se efectúan revisiones al sector de transporte público.
Meade indicó que es muy probable que trabajadores corruptos de la empresa estatal Petróleos Mexicanos estén involucrados en facilitar el robo realizado a tuberías, y señaló que las autoridades trabajan con Pemex para identificarlos.
La semana pasada cuatro militares y seis civiles perdieron la vida en un enfrentamiento en el poblado Palmito, en Puebla, cuando los elementos del Ejército acudieron a investigar una toma clandestina y fueron recibidos a tiros por los ladrones de combustible, conocidos como huachicoleros.
Este suceso desató las alarmas acerca de este tipo de delito, que no obstante lleva años afectando al negocio de Pemex y su infraestructura, y en lo que va de 2017 las autoridades han decomisado 2.64 millones de litros robados.
Con información de EFE y AP