Una delegación del Gobierno de México y otra de Estados Unidos comenzaron hoy en Washington su segunda ronda de negociaciones en el diálogo establecido entre los dos países para mejorar la lucha contra el narcotráfico.
Los protagonistas de este encuentro son el canciller mexicano, Luis Videgaray, su homólogo estadounidense, Rex Tillerson, así como el secretario mexicano de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, y la nueva secretaria estadounidense de Seguridad Nacional, Kirstjen M. Nielsen.
En la reunión también participan el fiscal general de Estados Unidos, Jeff Sessions, y el procurador general de México, Alberto Elías Beltrán, según indicó en un comunicado el Departamento de Estado.
México insistió para que Estados Unidos le comparta más información sobre las estructuras financieras que los carteles narcotraficantes han establecido al norte de la frontera común.
El procurador general interino de México, Elías Beltrán, dijo que para combatir el crimen trasnacional es necesario conocer la estructura de estas organizaciones en ambos países.
“Requerimos compartir información para saber qué están haciendo las organizaciones en Estados Unidos para ser contundentes en su desmantelamiento”, dijo durante una conferencia de prensa conjunta ofrecida por funcionarios de ambos gobiernos.Ambos gobiernos acordaron que la policía fronteriza estadounidense (ICE, por sus siglas en inglés) compartirá con las autoridades mexicanas las fichas criminales e información biométrica de mexicanos repatriados, detalles sobre más de 350 sentencias y cualquier vínculo a pandillas. En tanto, el procurador general Jeff Sessions calificó la situación actual como una crisis sin precedentes.
“Sabemos que podemos hacerlo mejor. Estamos viendo en Estados Unidos más oferta de drogas, drogas a precios más bajos y de mayor pureza”, indicó. “Estamos comprometidos con estos esfuerzos y creo que podemos y seremos exitosos”.Sessions agregó que una de sus prioridades en la lucha contra el narcotráfico internacional es el desmantelamiento de laboratorios que procesan precursores químicos de drogas sintéticas en México para “garantizar que no se conviertan en un gran problema. Creo que podemos progresar mucho”. Estados Unidos vive una crisis con opioides sintéticos -en particular el fentanilo- que sólo en 2016 causó 64,000 muertes. Con información de AP y EFE