Tras el nombramiento del rey Carlos III una historia sobre presuntos hijos no reconocidos del monarca ha tomado mayor fuerza con el destape de su hijo ilegítimo Simon Charles Dorante-Day, el cual habría tenido con la actual reina consorte Camilla Parker-Bowles cuando el príncipe Carlos estaba casado con Diana la princesa de Gales.
A lo anterior, surge ahora una “nueva” hija de Carlos III, pero a diferencia de su presunto medio hermano, la vástaga del rey sí sería legítima ya que habría sido concebida por el monarca y la princesa también conocida como Lady Di; pero, ¿cómo es que jamás se habló del caso?
La presunta hija de Carlos y Diana se llama Sarah, una bebé que incluso sería la hermana mayor del príncipe William y por consiguiente del duque de Sussex, Harry. Sarah habría nacido 10 semanas después de la boda real entre el hijo de la reina Isabell II y Diana Specencer.
En ese sentido, Sarah sería ocho meses mayor que el príncipe William quien nació el 21 de junio de 1982, según información proporcionada por fuentes anónimas de la monarquía citada en el diario estadounidense The Globe.
La teoría en torno a Sarah, la presunta hija de Carlos III
Según las fuentes de la monarquía, cuando el príncipe Carlos y la princesa Diana se comprometieron, la Corona británica quiso asegurar que Spencer era fértil para continuar con la descendencia de la familia real. Ante ello, Lady Di fue sometida a una intervención médica realizada por personal de salud de la monarquía.
Entonces a la princesa Diana le extrajeron óvulos para que fueran fertilizados con espermas del príncipe Carlos. La hipótesis de la teoría sugiere que uno de los médicos habría robado los óvulos de Lady Di: “En teoría, se debía destruir el óvulo, pero el médico lo sustrajo”, dijeron las fuentes.
Por lo tanto, Sarah, la presunta primogénita de Carlos y la difunta Diana, quedó en el anonimato por decisión del médico que habría robado los óvulos de la monarca ya que según él, aunque Sarah haya sido princesa, no podía ocupar el trono ya que en la década de 1980, aún se le daba preferencia a los hijos varones para ser los herederos reales.
El príncipe William se enteró de la existencia de su hermana y quería conocerla, dijeron las fuentes. “Se acordó un encuentro pero sólo asistió la esposa del príncipe, Kate Middleton, y quedó sumamente impresionada al ver el parecido entre Sarah y la princesa Diana”.
Mientras que Sarah, se enteró de su origen real tras la muerte de Lady Di en 1997 cuando sufrió un accidente automovilístico en París. Sarah presuntamente ha vivido bajo una identidad secreta y ahora ha sido obligada a cambiar de residencia y esconderse de los medios, dijeron las fuentes anónimas.
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