Luego del juicio político por “incitar a la insurrección”, el expresidente Donald Trump está en medio de otra controversia con la justicia, ya que el Fiscal de distrito de Manhattan finalmente tuvo acceso a los registros de sus finanzas.
Danny Frost, portavoz del fiscal Cyrus Vance, confirmó a AFP que consiguieron que la firma que maneja las finanzas de Trump, Mazars USA entregara los documentos que contienen informes sobre su actividad económica desde el 2011.
“Nuestro despacho obtuvo los documentos el lunes”, detalló Frost.
La oficina de Vance había solicitado esta información desde hace algunos años, pero el magnate interpuso un par de amparos ante la Suprema Corte para mantener blindada la información, bajo la premisa de que su rol como presidente le daba una protección especial.
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Sin embargo, en esta última, la Corte falló a favor del fiscal. De hecho, el Presidente del Tribunal Supremo, John Roberts, destacó que este argumento no era válido, pues la ley aplica para todos.
“En nuestro sistema judicial [se establece que] ‘el público tiene derecho a las pruebas de todos los hombres’. [Y] desde los primeros días del país, ‘todo hombre’ incluye al presidente de los Estados Unidos”, dijo Roberts, de acuerdo con NBC News.
Por su parte, el exmandatario también usó un portavoz para enviar un mensaje a la oficina del fiscal, y aseguró que “esta investigación es la continuación de la mayor caza de brujas política en la historia de nuestro país”, refiriéndose a una afirmación previa en la que aseguró que su impeachment era una “cacería” impulsada solamente por la “venganza”.
¿Por qué teme Trump?
El principal objetivo de la investigación es detectar irregularidades en las finanzas de Donald Trump, que puedan dar nuevas pistas sobre los supuestos fraudes fiscales y evasión de impuestos, pues según un reportaje de The New York Times, entre 2016 y 2017, el empresario pagó solamente 750 dólares de impuestos, y ha evitado sus obligaciones de 11 de los 18 años que se examinaron.
Otra de las pruebas que buscan son los pagos a mujeres que han acusado al expresidente de algún abuso de poder o manipulación, y que supuestamente recibieron dinero por guardar silencio, como la actriz pornográfica Stormy Daniels.