En la época de la carrera espacial, Rusia tuvo muchos éxitos y uno de ellos fue lograr tomar imágenes increíbles de la superficie de Venus, poco antes de que el módulo de aterrizaje dejará de servir por el intenso calor.
La nave rusa venera 13 se lanzó en 1981 y cuatro meses de viaje, finalmente tocó suelo de Venus el 1 de marzo de 1982.
Cabe señalar que el módulo de aterrizaje fue diseñado para tener una vida de media hora.
Durante su arribo desplegó un paracaídas para garantizar que se desliza a la superficie del planeta.
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Una vez en el suelo, su cámara tomó algunas fotos, fue durante dos horas que el módulo transmitió datos, incluidas estas tomas e información sobre el suelo del planeta.
Mejoran fotos a color
Hay que recordar que el sitio de aterrizaje parecía ser liso pero roto, pues en las fotos se veían abundantes escombros de varios tamaños.
Los investigadores originarios de Estados Unidos, al observar las fotos sugirieron que las áreas lisas podrían ser losas sólidas de roca o una costra de partículas finas unidas por la actividad química del planeta.
Ahora dos fotos de color amarilla enviadas por la sonda, han sido coloreadas y mejoradas desde que se tomaron originalmente a principios de los 80.
La agencia AFP, señala que originalmente estaban en blanco y negro y no parecían mostrar tanto detalle.
Con información de AFP
MAVR