El gobierno de Guatemala impuso ayer un Estado de sitio en El Estor, Izabal, al norte de la capital, luego de enfrentamientos registrados entre pobladores que defienden sus territorios de megaproyectos extractivos y policías enviados por las autoridades a defender las operaciones de estos.
El Estado de sitio fue publicado en el Diario Oficial y durará 30 días a partir de que entre en vigencia, para lo cual debe ser ratificado por el Congreso de la República.
En tanto, la Presidencia dispuso también que el Ejército participe en las acciones de seguridad, mientras dure dicha medida.
Entre los derechos constitucionales limitados están la libertad de acción, detención legal, interrogatorio a detenidos, de reunión y manifestación, la tenencia de armas y de locomoción limitado de las 18:00 a 6:00 horas del día siguiente.
Durante dos días, miles de policías se enfrentaron con pobladores campesinos e indígenas lanzándoles gases lacrimógenos y reprimiéndoles violentamente, mientras lluvias de piedras se lanzaban desde ambos lados dejando varios heridos.
Periodistas locales denunciaron que durante las confrontaciones, miembros de las Fuerzas Policiales amenazaron a estos para no grabarles, fotografiarles ni hacer su trabajo reporteril.
Las pugnas se registraron el viernes y sábado pasado entre las Fuerzas de Seguridad y decenas de indígenas q'eqchi' que se oponen al funcionamiento de la mina Fénix, de capital ruso, ubicada en el municipio de El Estor, en Izabal.
Los comunitarios pugnan para frenar la operación de la compañía de níquel, al carecer de estudios de impacto ambiental ni autorización de operaciones al no haberse realizado una consulta popular al respecto.
Por AP y EFE
CAR