Miembros del cuerpo de seguridad de España han tenido que alejarse de sus familias para protegerlos del coronavirus, ese es el caso de Alberto, quien trabaja en la Guardia Civil en Valencia y que no ha tenido contacto con sus hijos por tres semanas, pues podría estar en contacto con la enfermedad.
Cuestión que es sumamente complicada, pero decidió no ponerlos en peligro y continuar con su labor heroica, pero eso no ha impedido que fuera con su patrulla hasta la calle donde viven sus pequeños hijos y su esposa para saludarlos a la distancia.
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Dando lugar al emotivo momento en el que uno de sus hijos le grita a su papá, "Papi, ¡Te quiero!" en ese momento suenan las sirenas de la patrulla, para momentos después continuar con su trabajo.
Es en ese momento cuando el guardia civil se aleja; mientras que, el menor de edad no puede evitar su desilusión al ver partir a su padre y le grita por favor no se vayas, aunque es evidente que Alberto ya no lo puede escuchar.
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Por: Redacción Digital El Heraldo de México
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