Estados Unidos cerró la jornada electoral de este martes sin aliento y con claras reminiscencias a la noche electoral del 2016, ya que tras varias horas aún no se sabe quién será el próximo presidente, si Donald Trump o Joe Biden. La situación es preocupante y podría empujar al país a una crisis institucional e incluso a conatos de violencia, destacan algunos analistas políticos, quienes consideran que EU nunca había estado tan dividido frente a unos comicios
La destrucción del tejido económico y social provocada por la pandemia ha elevado las diferencias y acrecentado la polarización entre a sociedad, ya de por sí azuzada por el propio presidente Trump y amplificada por las redes sociales. Ahora son siete estados de los que pende el futuro de Estados Unidos, un país alertado por la amenaza de protestas y disturbios por parte de partidarios de uno u otro candidato: Pensilvania, Michigan, Wisconsin, Carolina del Norte, Georgia, y Nevada.
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De acuerdo con los mercados de apuestas las probabilidades respecto a la elección de Estados Unidos se han estrechado nuevamente, luego de que durante la noche se inclinaron con fuerza a favor de un triunfo del presidente republicano Donald Trump ante su rival demócrata Joe Biden, según datos de tres agregadores.
Probabilidad a favor de Trump subieron durante la noche
Smarkets, con sede en Reino Unido, daba a Trump y Biden una probabilidad casi idéntica de ganar las elecciones a las 10:00 GMT, con un 51% a favor del mandatario republicano. Las probabilidades a favor de Trump habían subido hasta un 80% durante la noche.
Las probabilidades de una victoria de Biden han caído a un 49% desde un 61% el martes.
El cambio se dio después de que Biden superó a Trump en el estado decisivo de Wisconsin con una estimación de un 89% de los votos escrutados hasta el momento. Trump tiene un 49% de las preferencias y Biden tiene un 49,3%, según Edison Research.
Faltan votos que contar
Trump reclamó falsamente la victoria sobre Biden el miércoles, a pesar de que aún falta por contar millones de votos en una carrera a la Casa Blanca que no se decidirá hasta que un puñado de estados completen los escrutinios durante las próximas horas o días.
El giro de los mercados de apuestas durante la noche fue “impulsado principalmente porque Trump aparentemente se quedó con el estado péndulo de Florida como resultado de una muy alta participación a su favor en el condado de Miami-Dade, que tiene una gran población cubana”, dijo Patrick Flynn, analista político de Smarkets.
Los apostadores en la plataforma británica Betfair daban un 62% de chances a que Trump consiga un segundo mandato en la Casa Blanca en 08:00 GMT, por encima del 39% cuando abrieron los locales de votación en la mañana del martes. Las probabilidades de una victoria de Biden en Betfair han caído a un 38% desde un 61%.
“Con miles de votos aún por contar, saber quién ganará sigue siendo una moneda al aire, pero por ahora Donald Trump es el favorito de los apostadores”, dijo el portavoz de Betfair, Sam Rosbottom.
Por EFE