El gobierno austriaco anunció el sábado un nuevo confinamiento, con la aplicación de un toque de queda y el cierre de restaurantes, hoteles, instituciones culturales y deportivas, para tratar de contener la segunda ola de la pandemia de COVID-19.
"Un segundo confinamiento se aplicará a partir del martes y hasta fines de noviembre", declaró el canciller conservador Sebastian Kurz en conferencia de prensa en Viena.
El toque de queda entrará en vigor todos los días entre las 20H00 (19H00 GMT) y las 06H00 (05H00 GMT).
"Ningún evento será posible. Esto incluye los sectores de deportes, cultura y ocio. Los hoteles tendrán que cerrar, con excepción de los viajes de negocios, y también nos vemos obligados a cerrar restaurantes y cafés, con la excepción de comida para llevar", explicó Kurz.
A diferencia del primer confinamiento, durante la primavera (boreal), el resto de comercios podrán seguir abiertos.
En las últimas semanas el número de positivos al coronavirus ha aumentado exponencialmente en Austria, muy por encima de los niveles del primer confinamiento.
El viernes se contabilizaron 5 mil 627 nuevas infecciones en 24 horas, y el sábado 5 mil 439.
A principios de octubre la cifra era apenas un millar por día.
Desde el principio de la epidemia, Austria ha registrado mil 109 muertes.
"Si no actuamos ahora, los servicios de cuidados intensivos van a estar saturados", advirtió el canciller.
El gobierno pide a las empresas que se pasen al teletrabajo donde sea posible, y las universidades e instituciones de enseñanza superior deben volver a los cursos en línea. Por el contrario, las escuelas primarias y las guarderías quedan abiertas. AFP