Después de que Irán admitiera que derribó por el accidente un avión ucraniano el miércoles, el primer ministro canadiense Justin Trudeau expresó su indignación y se dijo “furioso” por el hecho que provocó la muerte de 57 canadienses.
En conferencia de prensa, solicitó a Teherán realice una investigación exhaustiva y creíble, además de una compensación para las familias de los 176 muertos.
"Necesitamos claridad total sobre cómo pudo haber ocurrido una tragedia tan horrible [...] Canadá y el mundo todavía tienen muchas preguntas mismas que deben ser respondidas", aseveró.
Durante el encuentro con la prensa anunció que otorgó tres visas para que los investigadores canadienses se dirijan a territorio iraní, con el fin de "establecer presencia en el terreno".
La respuesta del primer ministro canadiense se da después que Teherán admitiera que sus fuerzas armadas derribaron el vuelo 752 de Ukraine International Airlines, tal como había acusado el mandatario.
Trudeau comunicó su reconocimiento por teléfono al presidente iraní, Hassan Rouhani, tras admitir su error, dijo que se deben tomar muchos más pasos.
Por: Redacción Digital Heraldo
MFA