LIMA. El gobierno de Donald Trump lanzó una nueva ofensiva contra el régimen de Nicolás Maduro. Además del congelamiento de todos los activos del Estado venezolano en su territorio, advirtió ayer que impondrá sanciones a cualquier empresa internacional que haga negocios con el chavismo.
En una cumbre en Lima este martes, a la que asistieron casi 60 países para discutir la situación en Venezuela, el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Bolton, subrayó que se necesitaba una mayor presión internacional y que las autoridades estadounidenses ahora pueden apuntar contra cualquier persona, incluyendo extranjeros, que respalden al gobierno de Maduro.
"Estamos enviando una señal a quienes quieren hacer negocios con el régimen de Maduro: procedan con extrema precaución... El momento para el diálogo ha terminado. Ahora es el momento de la acción".
Durante la reunión de representantes de 59 países y de organismos como el Banco Interamericano de Desarrollo y la Unión Europea, Bolton acusó al mandatario socialista de buscar ganar tiempo entablando negociaciones con la oposición.
Advirtió además a Rusia y China, los aliados más poderosos del gobierno sudamericano, que no presten más ayuda a Maduro. "Maduro está al final de su cuerda", dijo.
Las nuevas sanciones fueron impuestas en un decreto del presidente Trump dado a conocer el lunes por la noche.
La reelección de Maduro ha sido considerada irregular por Washington y decenas de democracias occidentales, que reconocieron al líder opositor Juan Guaidó después de que se proclamara presidente encargado citando a la Constitución.
Trump ha exhortado varias veces a Maduro a dejar el poder.
"Estados Unidos está actuando de manera asertiva para ahogar financieramente a Maduro y acelerar una transición democrática pacífica", dijo Trump. "Le decimos nuevamente a Rusia, y especialmente a aquellos que controlan sus finanzas: ¡No insistan en una mala apuesta!".
Venezuela sufre una profunda crisis económica marcada por una hiperinflación desde hace varios años, un colapso de sus servicios públicos y un escasez de productos que ha empujado a un éxodo calculado por la ONU en unos cuatro millones de personas.
Ayer en Lima, el secretario de Comercio de EU, Wilbur Ross, fue el encargado de presentar los planes de su país para "el día después", con el fin de reactivar la industria del petróleo.
No mencionó en ningún momento la posibilidad de recibir refugiados en Estados Unidos, ni de financiar a los países que los acogen, como Colombia o Perú.
l Desde Caracas, el canciller venezolano, Jorge Arreaza, denunció que la nueva medida ejecutiva de Trump busca formalizar un "bloqueo" económico, financiero y comercial en marcha contra el país petrolero.
Por EFE y REUTERS
lctl
EU ahoga a Maduro con sanciones
amagan con castigar a quienes ayuden al chavismo. piden más presión mundial