China baja pobreza extrema

El gobierno de Xi Jinping trabaja a marchas forzadas para alcanzar el umbral mínimo de bienestar

BEIJING. Un campesino camina bajo la lluvia, con una pala al hombro y una bolsa con dos elotes. Va a su casa en la aldea Lijiwan, en Huanggang, que hasta hace cuatro años era un retrato de pobreza extrema en China. La escena contrasta con el dinamismo y prosperidad de megaciudades como Beijing o Shanghái, y plasma uno de los principales desafíos del gobierno. China se puso como meta erradicar la pobreza en 2020 e implementó proyectos modelo –parecidos a las cooperativas– para que los habitantes de estas zonas alcancen el umbral mínimo de bienestar.

Ahora la localidad, en la que habitan más de 800 personas, es uno de los ejemplos que se ponen a la vista para mostrar el trabajo que intenta reducir la diferencia entre las ciudades y el campo con el fin de tener una sociedad "modestamente acomodada".

Localizada en la provincia de Hubei, la aldea tiene huertos y plantaciones de hortalizas; una planta fotovoltaica y una tratadora de agua. El objetivo: que los aldeanos sean parte fundamental para la solución del problema al involucrarse en la actividad económica colectiva.

Como ejemplo, la planta fotovoltaica dejó 120 mil yuanes (331,766 pesos mexicanos) de ingreso que fue distribuido entre los habitantes.

Las medidas permiten la autosuficiencia de los habitantes, al alcanzar una renta per cápita de 4 mil 500 yuanes en 2018, de acuerdo con datos de autoridades locales, una cifra que duplicó el ingreso anual anterior que alcanzaba 2 mil 300 yuanes.

En 2018 –de acuerdo con la oficina de Alivio de Pobreza y Desarrollo del Consejo del Estado–, más de 13 millones de ciudadanos salieron del rezago en todo el país.

Shi Yuyan, subdirectora del Distrito Huangzhou, detalla que la aldea reúne elementos para promover el desarrollo urbano y rural, en cuyos objetivos está el fomento a la agricultura.

Por: Lizeth Gómez de Anda.

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