MYRTLE BEACH. El huracán Florence comenzó a azotar ayer la costa este de EU con vientos y lluvias intensas, que según las proyecciones podrían causar inundaciones catastróficas, pese a que el fenómeno fue degradado a categoría 2.
El inmenso meteoro se debilitó a categoría 2, de 5 en la escala de Saffir-Simpson, pero las autoridades advirtieron de los riesgos de los potentes vientos de 165 kph y las lluvias torrenciales.
"El huracán #Florence va a desacelerarse a medida que se acerque a la costa y avance por tierra. Esto va a provocar inundaciones extremadamente peligrosas", informó la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA).
Cerca de la línea costera los vientos ya se hacían notar y la localidad de Myrtle Beach, en Carolina del Sur, estaba prácticamente desierta.
"Me sentía bien hasta que me desperté esta mañana y vi que era una ciudad desierta", contó un residente de 40 años que dijo que se refugiaría tierra adentro.
A medida que el huracán se acercaba, Donald Trump y las autoridades locales instaron a los residentes que se encuentran en la trayectoria del fenómeno a que evacuaran sus casas. No obstante, miles se negaban a buscar refugio.
Los llamados a tener cuidado con Florence llegaron hasta el espacio, y desde la Estación Espacial Internacional el astronauta alemán Alexander Gerst tuiteó fotos de la gigantesca tormenta y escribió: "¡Cuidado, Estados Unidos!".
El NHC reiteró que Florence sigue creando "una situación potencialmente fatal" debido a los riesgos de que la tormenta tome fuerza cerca de las zonas costeras.
Las órdenes de evacuación alcanzan a unas 1.7 millones de personas en Carolina del Norte, Carolina del Sur y Virginia.
Se estima que cuando la tormenta toque tierra en Carolina del Norte y del Sur el jueves por la noche o en las primeras horas del viernes, las lluvias sumarán casi un metro.
Cinco estados declararon emergencia: Carolina del Norte, Carolina del Sur, Georgia, Maryland y Virgina, además de la capital Washington. Las aerolíneas cancelaron al menos 1.800 vuelos.
Unas 10 millones de personas viven en áreas por las que pasará el huracán, en donde las casas y tiendas comerciales de la costa habían sido cubiertas con madera en anticipación a la llegada de la tormenta.
El presidente Donald Trump negó ayer el balance oficial de tres mil muertos por el paso del huracán Maria hace un año por Puerto Rico, afirmando que la cifra fue inflada por los demócratas para perjudicarlo, generando indignación en la isla.
En respuesta, la representante Ileana Ros-Lehtinen (republicana de Florida) dijo a periodistas que cree que la cifra de casi tres mil decesos es sólida.
"¿En qué tipo de mente se tuerce esa estadística, 'Oh, las noticias falsas intentan dañar mi imagen'?", dijo.
AFP, REUTERS Y EFE
