El Cadillac One del Presidente de Estados Unidos, conocido como La Bestia ofrece a Trump la protección de un tanque, el confort de una limusina, pero está equipada como si fuera una ambulancia, este automóvil viajó ayer con el magnate a Reino Unido en su visita prevista hasta el 15 de julio.
La Bestia es famosa por su espectacularidad, su valor se estima en 15 millones de dólares y se dice que hay unas 12 copias.
Trump arribó ayer a Reino Unido poco después de cuestionar el plan para el Brexit de la primera ministra británica Theresa May.
Su automóvil, de ocho toneladas de peso con puertas de ocho pulgadas de blindaje y ventanas de 12 centímetros de grosor, sirvió para protegerlo de las protestas en su contra en Londres.
En cada viaje que hace Trump al extranjero lo acompañan dos Cadillac One idénticos, con el objetivo de despistar a posibles atacantes.
En caso de que surgiera alguna eventualidad médica durante el encuentro con la primera ministra británica o la reina Isabel II, La Bestia cuenta con un botiquín que transporta bombonas de oxígeno y bolsas de sangre compatibles con su grupo sanguíneo.
La Bestia está fabricada de aluminio, titanio, cerámica y acero; el interior se encuentra totalmente sellado capaz de resistir posibles ataques químicos.
El tanque del combustible se diseñó con un polímero que solidifica al instante en caso de que éste sea perforado.
La carrocería fue fabricada especialmente para el Presidente de Estados Unidos por General Motors, única de todas las que se han elaborado para la Casa Blanca desde 2009.
El vehículo presidencial está equipado además con cañones de gas lacrimógeno, armas de distintos calibres, 14 cámaras ubicadas en posiciones estratégicas y GPS.
El motor V8 alcanza una velocidad de 100 km/h, tarda 15 segundos en lograr avanzar con esa rapidez; consume unos 30 litros de gasolina cada 100 kilómetros y dispone de neumáticos "RunFlat" que tienen la capacidad de circular hasta 100 kilómetros, aún ponchados.
El gobierno de Reino Unido desplegó alrededor de 10 mil agentes para proporcionar seguridad a Trump.
POR SAYURI LÓPEZ
En cada viaje que hace Trump al extranjero lo acompañan dos Cadillac One idénticos, con el objetivo de despistar a posibles atacantes.
En caso de que surgiera alguna eventualidad médica durante el encuentro con la primera ministra británica o la reina Isabel II, La Bestia cuenta con un botiquín que transporta bombonas de oxígeno y bolsas de sangre compatibles con su grupo sanguíneo.
La Bestia está fabricada de aluminio, titanio, cerámica y acero; el interior se encuentra totalmente sellado capaz de resistir posibles ataques químicos.
El tanque del combustible se diseñó con un polímero que solidifica al instante en caso de que éste sea perforado.
La carrocería fue fabricada especialmente para el Presidente de Estados Unidos por General Motors, única de todas las que se han elaborado para la Casa Blanca desde 2009.
El vehículo presidencial está equipado además con cañones de gas lacrimógeno, armas de distintos calibres, 14 cámaras ubicadas en posiciones estratégicas y GPS.
El motor V8 alcanza una velocidad de 100 km/h, tarda 15 segundos en lograr avanzar con esa rapidez; consume unos 30 litros de gasolina cada 100 kilómetros y dispone de neumáticos "RunFlat" que tienen la capacidad de circular hasta 100 kilómetros, aún ponchados.
El gobierno de Reino Unido desplegó alrededor de 10 mil agentes para proporcionar seguridad a Trump.
POR SAYURI LÓPEZ