WASHINGTON, EU.- Jerry Dias, presidente del sindicato Unifor, una de las uniones sindicales más importantes de Canadá, exige a los negociadores canadienses y estadounidenses a que fuercen al gobierno mexicano a subir los salarios de sus trabajadores porque no favorecen la productividad sino la pobreza.
El problema de esta renegociación no es Canadá, sino México y concretamente que sus negociadores se niegan a revisar el piso de los salarios en ese país, son salarios tan bajos que no hay forma de competir y eso explica que el 52 por ciento de la población vive en la pobreza", dijo el sindicalista Jerry Dias.Tanto el gobierno de Canadá como el de Estados Unidos han manifestado su interés de hacer incrementar los salarios en México al negociar un nuevo capítulo en materia laboral en la modernización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte. "México tiene que entender en esta negociación que va a tener que ceder en algún aspecto, tú no puedes favorecerte de algo para siempre y no aportar nunca nada", afirmó. Desde la entrada en vigor del TLCAN en 1994, cuatro plantas cerraron en Ottawa, Canadá, y 10 en Estados Unidos y abrieron ocho en México. “México detiene el ocho del mercado automotriz y el 45 por ciento de los empleos del sector”, criticó.
No podemos tener un acuerdo trilateral del TLCAN entre Canadá, Estados Unidos y México, donde el salario mínimo en México es de 0.90 dólares la hora. No podemos tener un acuerdo tripartito con salarios por debajo de cuatro dólares la hora”, agregó.El acuerdo, señaló, debe tener cambios que permitan proteger y generar empleos en Canadá y Estados Unidos, porque con el actual tratado continúa la migración de buenos empleos manufactureros de Canadá y EU hacia México. “Las cosas tienen que fijarse, pero tampoco debemos tener miedo de salirnos de la mesa de negociación”, expresó Dias. "Es muy triste y desolador ver que en Canadá se cierran fábricas y ninguna se vuelve a abrir, todas se reabren en México por los bajos salarios", argumentó. El secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, dijo al inicio de la primera ronda de negociación para la modernización del TLCAN que el tema de los salarios no formaba parte de la discusión porque la homologación de salarios es inviable y se trata de un asunto de se tiene que decidir sólo en el país.
México establece de una manera integral y con un diálogo en sus propios instituciones laborales y empresariales el debate sobre su política de salarios mínimos, esto claramente es independiente y sin duda el fortalecimiento de derechos laborales que tendrá un reflejo en el aumento de salarios”, afirmó Ildefonso Guajardo.Al respecto, el sindicalista canadiense dijo que en una negociación las partes no sólo deben tomar lo que les conviene, sino también aceptar a ceder y dar cosas. “¿Qué estamos teniendo de México? ¿Tequila? ¿Qué más? Les estamos dando todo y no recibimos nada de ellos. No es justo”, lamentó. Dias argumentó que sólo el cuatro por ciento del costo de un auto es para cubrir salarios, por lo tanto consideró que es injusto tener un acuerdo con un país que “no quiere jugar bajo reglas justas”. Comentó que el tema de los salarios lo ha tratado varias veces con sus contrapartes estadounidenses así como el secretario de Comercio de Estados Unidos, pero dijo que "en México no hay con quien hablar, no tienen sindicatos fuertes, muy pocos tienen legitimidad y trabajan a la par del gobierno". Pierre-Marc René/Enviado