De origen árabe y ya también mexicano, pues ya se produce en grandes cantidades en nuestro país.
Se obtiene poniendo a fuego bajo la leche en un recipiente de barro, así logra cuajarse.
Puede ser condimentado con especies, además de algunos otros ingredientes para cambiar su sabor.
Es de color blanco.
Su única variedad es la del jocoque seco.
Es muy demandado por su bajo contenido calórico y su gran versatilidad para utilizarse en la cocina.
Por lo general se utiliza como: botana o para ensaladas, sin embargo, al igual que el resto de los productos lácteos, se puede combinar con una gran variedad de productos gastronómicos.