SALUD

Este es el nuevo riesgo que se descubrió por tomar antiinflamatorios no esteroideos (AINE)

El medicamento indicado para atacar dolor e inflamación no es recomendable en determinados pacientes según revela un nuevo estudio.

ESTILO DE VIDA

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antiinflamatorios, esteoideos, enfermedad.Fuente: Pixabay.

Los anttinflamatorios no esteroideos (AINE), medicamentos necesarios para aliviar el dolor de diferentes afecciones, pueden desencadenar múltiples efectos secundarios. Un reciente estudio, que ha recogido datos de más de 700.000 consultas de atención primaria en Hampshire, al sudeste de Reino Unido, ha demostrado un nuevo riesgo al tomar estos analgésicos.

La investigación, publicada en la revista “BJP Open”, indica que el uso de los antiinflamatorios no esteroideos puede estar relacionado con el incremento de una enfermedad: el daño renal. El estudio apunta que en los últimos dos años previos a la pandemia causada por el COVID-19 la prescripción de este medicamento descendió notablemente pero en muchos casos se continuaba recetando este medicamento a pacientes con riesgo alto de fallo renal.

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Los expertos indican que si bien está muy extendido en la comunidad médica y sanitaria las contraindicaciones de los antiinflamatorios no esteroideos, el estudio muestra cómo se continúa indicando este medicamento en casos en que puede agravar otra enfermedad en los pacientes, al presentar éstos alto riesgo de fallo renal.

Los antiinflamatorios no esteroideos se prescriben en general para pacientes con dolor e inflamación pero, tal como advierten los expertos en esta investigación, los efectos secundarios pueden ser de más graves que la propia enfermedad a tratar. Los AINE pueden estar relacionados con lo que se denomina lesión renal aguda, cuando esta se produce en nuestro organismo los riñones dejan de funcionar de forma inmediata y puede alcanzar la insuficiencia renal completa.

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El alto riesgo que conlleva el uso de los antiinflamatorios no esteroideos desaconseja por completo su prescripción en pacientes con posibilidades de fallo renal, recuerdan los responsables del estudio. Así, apuntan que si bien es notable el descenso de su indicación, tanto médicos como enfermeras y farmacéuticos deberían considerar suprimir este medicamento para pacientes con determinada enfermedad.