Una planta ideal para para ornamentar el exterior de tu hogar es el paragua, también conocida como papiro o palmera de paraguas. Este ejemplar es originario de Madagascar y habitualmente crece en las orillas de los ríos o cursos de agua. Sin embargo, con el correr de los años se ha instalado como una planta ideal para las inmediaciones de casa.
Su nombre científico es Cyperus alternifolius y es un ejemplar que integra la familia de las ciperáceas. Se caracteriza por ser una planta robusta que vegeta a partir de rizomas cortos de los que surgen tallos que alcanzan entre 60 y 150 centímetros de altura. Sus hojas se abren de manera similar a las pencas de una palmera y alcanzan hasta 25 centímetros, por eso es que también se la llama palmera de paraguas.
El paragua del hogar tiene un gran poder ornamental y quedará de maravillas en cualquier sector de la casa, como así también en algunas partes puntuales del jardín. Aunque en este último caso es fundamental controlar su expansión para que no se convierta en una planta invasora que se haya extendido por cada rincón del parque, por eso también la ventaja de colocarla en una maceta en las inmediaciones de la vivienda.
El crecimiento de esta planta depende del agua, por lo tanto en el exterior crecerá cerca de estanques y jardines acuáticos. Mientras que si se cultiva en plena tierra, también prosperará, siempre y cuando se mantenga un alto nivel de humedad. Aunque si se cultiva el paragua en una maceta, habrá que tener cuidado de colocar estos ejemplares en contenedores donde la tierra quede cubierta de agua.
Siguiendo esta línea, la plantación del paragua en exteriores se podrá realizar sin inconvenientes en zonas donde predominen climas cálidos y no se registren heladas durante el invierno. Si se desea cultivar en el interior del hogar, se deberá tener en cuenta su elevada demanda de agua, pero esto también hará que la sala se llene de humedad debido a la transpiración del papiro. Además esta planta deberá estar ubicada a pleno sol o en una zona con rayos parciales, por lo tanto mientras más iluminación natural reciba, mayor cantidad de ejemplares se producirán.