MAL OLOR

¿Sufres de mal olor corporal? Te explicamos por qué y cómo solucionarlo

Muchas veces el mal olor corporal proviene por una mala dieta o poca higiene personal. Si no es el caso deberás ir al médico.

ESTILO DE VIDA

·
El sudor no es el verdadero problema. Foto: Especial.

¿Te has percatado que tú o alguien que conoces sufre de mal olor corporal? Pues se puede tratar de osmidrosis o bromhidrosis, que es un trastorno que afecta a millones de personas en algún momento de su vida y hace que el cuerpo tenga aromas desagradables.

Y es que la piel, el órgano más grande y visible que poseemos los seres humanos, es el hogar de numerosas estructuras encargadas de producir grasa, sudor y cabello, y todos los olores asociados a ellos. Nuestra piel mide, en promedio, unos dos metros cuadrados y en cada centímetro cuadrado del órgano poseemos más de 600 glándulas productoras de sudor, el cual en sí no tiene olor, pero por su reacción con bacterias es cuando se produce el mal olor. 

La bromhidrosis es un fenómeno común en los adolescentes que atraviesan la pubertad, principalmente mujeres de entre 14 y 16 años y hombres de entre 15 y 17. Pero también puede afectar a personas obesas o a los que consumen alimentos ricos en picantes y especias y a personas que sufren enfermedades como diabetes.

Desafortunadamente, la persona que tiene mal olor se acostumbra tanto a su propio aroma que a menudo es la última en notarlo. La solución más simple es mejorar nuestra higiene personal, como bañarse y usar ropa limpia todos los días, así mismo, lavar esta con la temperatura más alta posible, para matar bacterias. 

A veces es necesario ir al doctor 

Es probable que la sudoración extrema deba ser tratada, para evitar malos olores. Pero sólo un médico podrá determinar el tratamiento, por ejemplo, para la sudoración severa, un trastorno llamado hiperhidrosis, se están probando tratamientos como las inyecciones de la toxina botulínica (Botox) en la piel cerca de la axila.

Los expertos recomiendan que consulte a su médico si su cuerpo comienza a liberar un olor diferente aun cuando modificó su alimentación.  Además, si el olor es similar a un aroma de frutas podría ser un indicio de diabetes o si el olor es parecido a la lejía o blanqueador, podría ser signo de algún trastorno renal o hepático.

msb