Aunque las plantas medicinales son muy comunes en México desde la época prehispánica, todavía hay elementos que no conocemos tan bien, como en el caso de las algas. Estos elementos de la naturaleza son constantemente utilizados en la gastronomía oriental y, a pesar de que llegaron al continente mexicano desde hace muchos años, se descubrió que pueden ser utilizadas como suplemento nutricional.
Tal es el caso del fucus vesiculus, un alga comestible que resulta ser rica en vitaminas y minerales que ha sido utilizada tradicionalmente para el tratamiento de padecimientos como reumatismo y artritis. De manera común se conoce como "sargazo vesiculoso" y consiste en un alga marina color marrón que proviene del mar del Norte y los océanos Pacífico y Atlántico. Durante los últimos años, también se ha utilizado para dietas de adelgazamiento, razón por la que ha ganado popularidad.
Propiedades del fucus
Dicha alga se ha usado como medicina alternativa, pues supone un efecto laxante y diurético, gracias a la importante cantidad de mucílagos que posee, además de diferentes minerales y vitaminas. Los mucílagos ejercen un efecto retardante en la absorción de nutrientes. En conjunto, su consumo provoca una sensación de saciedad y efectos positivos sobre el tránsito intestinal. Entre sus beneficios también se encuentra un efecto protector y suavizante sobre la piel.
Aunque parezca imposible de conseguir, esta planta puede adquirirse como suplemento dietético, ya sea en forma de pastillas o comprimidos. Sin embargo, el fucus también es posible de adquirir en extractos o triturados para ingerirlo en bebidas. Otra de sus propiedades es que contiene una importante cantidad de yodo, por lo que puede acelerar el metabolismo e, incluso, repercutir en la actividad de la tiroides. Bajo esta línea, es necesario destacar que su consumo podría tener efectos negativos en ciertas personas.
Contraindicaciones
Aunque podría pensarse que todo lo relacionado con el alga en cuestión son beneficios, resulta un tanto peligrosa bajo ciertas circunstancias. Al tener un alto contenido de yodo, puede producir hipertiroidismo. Como parte de sus efectos secundarios puede producir dolor abdominal. No se recomienda su ingesta en personas con problemas cardiovasculares, con hipertensión o con trastornos de ansiedad.