El actor y empresario Roberto Palazuelos gusta de disfrutar de los placeres que le proporciona la vida en cuanto tiene la menor oportunidad, y aunque sus negocios lo llevan de Acapulco a la Ciudad de México y al Caribe, sin duda en donde lo hemos visto más a gusto disfrutando de sus ratos libres es en el puerto guerrerense, en donde tienen una espectacular mansión que es la envidia de sus vecinos y de los famosos, la espectacular Casa de la Ensenada.
Este impresionante rincón de Acapulco es uno de los hogares de Roberto Palazuelos, quien no duda en demostrarlo al mundo desde sus redes sociales o en algunas entrevistas que ha concedido, el espacio, ubicado en una ensenada, es una increíble mansión que poco o nada tiene que envidiarle a las casas de las islas griegas o italianas.
Mejor conocida como Casa de la Ensenada, ahí es donde el actor, también conocido como “El Diamante Negro”, disfruta del sol, la playa y unos espectaculares atardeceres que comparte en su cuenta de Instagram, para satisfacción de sus millones de seguidores. El inmueble se encuentra enclavada a las orillas del Pacífico mexicano y es una de las siete propiedades que se le conocen al empresario.
“Bendito eres que tengas esta casa”
En una ocasión, durante una entrevista con el conductor Jordi Rosado, Roberto Palazuelos contó cómo adquirió la propiedad, que en un inicio ere de uno de sus amigos: "Siempre le decía a Pepe: 'Qué casota, qué bendito eres que tengas esta casa', y ahora la compré’,” reveló durante el encuentro. La lujosa mansión cuenta con una alberca principal con vista al mar, vista que se integra al a perfección con el entorno natural de Acapulco, además de otras cuatro albercas.
La Casa de la Ensenada cuenta con su propia página de Facebook y un sitio web en donde se asegura que es un espacio que transmite“lujo, relajación y exclusividad", y no queda la menor duda que así es. Desde cualquier ángulo en donde se encuentre el espectador puede disfrutar de los impresionantes atardeceres del puerto e incluso en temporadas concretas es posible presenciar la visita de ballenas a lo lejos de la bahía.
La mansión, que mantiene una decoración Boho chic, está rodeada de abundante vegetación, así como banda por las rocas y cerros que dan al Océano Pacífico. Cuenta con un comedor principal, ubicado en un punto estratégico en donde prevalece a todas horas la luz natural, así como un marea lounge en donde es posible realizar reuniones hasta para cien personas. El inmueble tiene además seis recámaras decoradas con un toque minimalista, ademas de tener inspiración mediterránea.