El próximo domingo 8 de abril se cumplirán 16 años de la muerte de María Félix y 104 de su nacimiento y para mantener vivo su legado, la fundación que lleva su nombre exhibirá en Francia, Argentina y México, el acervo más grande de La Doña.
La fundación cuenta con más de mil piezas que formaron parte de la diva del cine mexicano, entre ellos vestidos que utilizaba en sus películas, accesorios, prendas de alta costura de su guardarropa personal, pinturas, porcelana, zapatos, fotografías, afiches, óleos, autógrafos y revistas.
Gonzalo Rodríguez, presidente de la fundación, explicó que desean recorrer los países en los que María Félix conquistó con su talento y presencia con piezas nunca antes vistas y que considera “tesoros”. En otoño próximo llevarán 25 trajes de alta costura, diseñados por Dior y Chanel, que la actriz lució en el Hipódromo de Longchamp en París, un lugar donde la diva tenía varias cuadras de caballos.
“María siempre estuvo relacionada con los caballos.Con esta muestra regresa a los lugares donde fue grande. Incluso la llamaron La reina de los hipódromos europeos en los años 70”, comentó Rodríguez.
Este mismo año planea llevar a Argentina, país que la histrión conquistó en los años 50, los trajes que usó en la única película que protagonizó ahí, La pasión desnuda.
Mientras que en México se exhibirán hasta el 29 de julio en el Museo del Noreste de Monterrey (Mune) la más grande muestra hasta ahora, compuesta por 130 prendas que la diva usó en las 47 película que filmó. Además de dos de los “tesoros” de la fundación: el vestido de novia que María Félix lució el 18 de octubre de 1952 cuando se casó con Jorge Negrete y la condecoración de la medalla de la Legión de Honor, el máximo galardón que recibió por parte del gobierno francés.
En esa subasta adquirió el traje de novia de la boda con Jorge Negrete, pinturas, porcelana y ropa de cine. Pero pensando en que todas las colecciones que él tenía correrían la misma suerte, decidió reunir más cosas de María Félix para hacer un acervo o museo.
“Después conocí al heredero y a través de otra subasta y personas que habían comprado en la primera. Empecé a comprar más artículos. Desde entonces todos los días adquirimos más cosas de María, muchas de ellas que se habían dispersado por el mundo, han regresado a la fundación”, afirmó.
La fundación no tiene un lugar fijo, las más de mil piezas están resguardadas en un almacén de Miami Florida, cada una bajo cuidado especial. Aunque cada pieza tiene un costo por aseguramiento, ninguna está a la venta
“María siempre estuvo relacionada con los caballos.Con esta muestra regresa a los lugares donde fue grande. Incluso la llamaron La reina de los hipódromos europeos en los años 70”, comentó Rodríguez.
Este mismo año planea llevar a Argentina, país que la histrión conquistó en los años 50, los trajes que usó en la única película que protagonizó ahí, La pasión desnuda.
Mientras que en México se exhibirán hasta el 29 de julio en el Museo del Noreste de Monterrey (Mune) la más grande muestra hasta ahora, compuesta por 130 prendas que la diva usó en las 47 película que filmó. Además de dos de los “tesoros” de la fundación: el vestido de novia que María Félix lució el 18 de octubre de 1952 cuando se casó con Jorge Negrete y la condecoración de la medalla de la Legión de Honor, el máximo galardón que recibió por parte del gobierno francés.
“Creo que es un reconocimiento no sólo para María, sino para todo México, porque fue la primera latina en recibir esta condecoración, nosotros tenemos toda la documentación, y la medalla física”, detalló Rodríguez.LA FUNDACIÓN MARÍA FÉLIX El presidente de la fundación, Gonzalo, contó que ésta nació en 2014 en el centenario de la actriz con el objetivo de recordar y dar importancia a María como símbolo de la cultura mundial. Gonzalo, un cubano americano, coleccionista de ropa de cine de los años 40, 50, y 60, nunca conoció a María Félix; sin embargo, su interés por formar el acervo surgió en 2007, cuando se enteró de la subasta que el heredero universal de la actriz (Luis Martínez de Anda) realizaría, en ese mismo año en casa Christie’s de Nueva York. “Como en muchas otras subastas, adquirí el catálogo vi todo lo que había y empecé a indagar en lo que había pasado tras su muerte. Me dio mucha tristeza saber que todo lo que María coleccionó durante 88 años, iban a subastarse en un abrir y cerrar de ojos”, recordó Rodríguez.
En esa subasta adquirió el traje de novia de la boda con Jorge Negrete, pinturas, porcelana y ropa de cine. Pero pensando en que todas las colecciones que él tenía correrían la misma suerte, decidió reunir más cosas de María Félix para hacer un acervo o museo.
“Después conocí al heredero y a través de otra subasta y personas que habían comprado en la primera. Empecé a comprar más artículos. Desde entonces todos los días adquirimos más cosas de María, muchas de ellas que se habían dispersado por el mundo, han regresado a la fundación”, afirmó.
La fundación no tiene un lugar fijo, las más de mil piezas están resguardadas en un almacén de Miami Florida, cada una bajo cuidado especial. Aunque cada pieza tiene un costo por aseguramiento, ninguna está a la venta