También en materia de cultura, la confrontación y las acusaciones imperaron durante el debate que sostuvieron las tres mujeres, designadas por los candidatos a la Presidencia, como encargadas del sector.
Escasas propuestas y algunas coincidencias, sobre todo en materia de seguridad social para los artistas, pero sobre todo diferencias en cuanto a cifras, enfoques y programas implementados marcaron el Diálogo por el sector cultural, organizado por el Grupo de Reflexión sobre Economía y Cultura (Grecu).
Por momentos, el escenario del debate presidencial pareció repetirse: aquí hubo recibimientos cordiales, incluso abrazos entre unos y otros, pero el enfrentamiento acabó por imponerse.
Por momentos la actriz Ana Francis Mor, de la Coalición Sigamos haciendo historia, fue blanco de dos embates: el de Consuelo Sáizar, de Fuerza y Amor por México, y el de Ruth Alejandra López de Movimiento Ciudadano.
Aquí también se acusó al gobierno en turno de desmantelar la maquinaría cultural construida y la representante de Xóchitl Gálvez incluso calificó este sexenio como “culturalmente derrotado”. El debate abarcó cinco segmentos en los que se pidió a las panelistas exponer sus propuestas, pero desde el inicio avanzó al descrédito.
El inicio estuvo marcado por las cifras de Ana Francis, quien afirmó que la 4T ha sido el gobierno que más dinero ha destinado a la cultura, más películas ha apoyado y más becas ha entregado.
“Nosotros tenemos otros datos”, dijo Ruth, y cuestionó que se prometió descentralizar la cultura, pero la promesa de trasladar la SC a Tlaxcala nunca se cumplió; Sáizar agregó que el dinero se concentró sólo en dos proyectos: Chapultepec y el Tren Maya. Ana Francis defendió que, como nunca, este gobierno atendió el tema de la desigualdad y combatió el clasismo y el racismo que imperó en la cultura “durante el periodo neoliberal”.
Las propuestas de la representante de Sheinbaum incluyeron cambiar el régimen de los trabajadores por honorarios a eventuales en la SC; dar “más vida” a circuitos, corredores culturales y carnavales; continuar combatiendo los pasivos que acumula la dependencia; más apoyo federal de acompañamiento a los estados para que exijan presupuesto a sus gobiernos y aumentar la comunicación “con muchas comunidades culturales”.
Por parte de Máynez, Ruth propuso priorizar la descentralización de la cultura; destinar 1 por ciento del PIB a la cultura; generar una política económica y fiscal que beneficie la participación de la iniciativa privada en el sector; priorizar la creación de infraestructura cultural en los estados; impulsar la digitalización de los recursos culturales y la reactivación de un bono cultural.
Saízar, por parte de Xóchitl Gálvez, habló de destinar 25 millones de pesos para 2025; diseñar un proyecto mexicano de cultura; un sistema nacional de trabajadores de la cultura; resolver el tema de los pasivos laborales en la SC, el INBAL y el INAH; auditar la estructura orgánica de la dependencia para evitar duplicidades; diseñar un programa de mecenazgo inspirado en el estadounidense y revisar los costos que algunos servicios culturales tienen para los extranjeros que llegan a México.
ELEMENTOS
- Sáizar criticó el alcance de los Semilleros creativos que han atendido a 15 mil niños.
- Ana Francis dijo que la 4T paso de 1500 mdp de pasivos laborales a 600 mdp.
- Ruth López se refirió al ejemplo de Jalisco donde gobierna Movimiento Ciudadano.
Por Luis Carlos Sánchez
EEZ