La economía mexicana creció 0.3 por ciento en junio, frente al mes anterior, según estimaciones preliminares del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
El repunte obedece a la continua apertura de la actividad productiva del país y al avance del proceso de vacunación.
Con ello, de manera anual, la economía mexicana avanzó 14.7 por ciento frente a junio de 2020, debido a un efecto base de comparación favorable, según el Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE).
“Cabe recordar que, en junio de 2020, el IGAE (Indicador Global de la Actividad Económica) se contrajo 14.5% anual, por lo que el crecimiento anual significativo se debe, principalmente, a la baja base de comparación”, señaló Gabriela Siller, economista en jefe de Banco Base.
Para las actividades secundarias (industria), el IOAE estima un crecimiento anual de 14.4 por ciento (mensual de -0.7 por ciento) y para las terciarias (servicios) un avance anual de 14 por ciento (mensual de 0.4 por ciento).
Los nuevos números del INEGI destacan que la economía creció 0.6 por ciento en mayo, frente al mes previo, mientras que de manera anual alcanzó un avance de 24.5 por ciento.
Analistas estiman que, este año, el Producto Interno Bruto (PIB) del país va a crecer entre 5.5 y 7 por ciento, favorecido por la rápida recuperación del país vecino del norte.
En cuanto a la tercera ola de contagios del COVID-19, el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) confía en que no va a tener un impacto “muy fuerte” en materia económica,
“El escenario base es que sí venga una tercera ola, que sea una ola de contagios y no de fallecimientos y que no tenga un impacto económico muy fuerte”, señaló Gabriel Casillas, presidente del Comité Nacional de Estudios Económicos del IMEF.