Igual que Uber y otras firmas de transporte basados en plataformas digitales, Urbvan Transit, de movilización colectiva, opera sin contar con un domicilio, teléfono y medios de contacto en el país, para aclaraciones o reclamaciones.
La firma, encabezada por Renato Picard Álvarez y Joao de Matos Coelho Albino, ha recibido quejas por las redes sociales, sin ser atendidas.
El Heraldo de México realizó un ejercicio en su plataforma digital, en la que primero responde un robot y posteriormente una persona.
“No contamos con un número, todas las dudas se resuelven por este medio”, apunta el servicio de atención.
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En julio de 2018, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) multó a las firmas Uber, Easy Taxi y Cabify por 6.5 millones de pesos.
Dentro de los argumentos estaban que se “viola” lo establecido por la ley, al no señalar un domicilio, teléfono y demás medios de contacto en el país, para aclaraciones o reclamaciones por la aplicación de cobros de servicios adicionales sin la autorización expresa del consumidor (tarifa de reparación, limpieza o cargos por objetos olvidados).
Uber argumentó que las controversias se podían resolver con base en la legislación de Amsterdam, en Países Bajos, al estar establecida en ese país. Finalmente las empresas impugnaron las multas.
Urbvan Transit tiene origen en el país, y pese a operar desde finales de 2016 y observar esa situación, tampoco fincó las acciones que eviten multas.
El jueves, se publicó que la empresa al igual que las otras firmas extranjeras también se deslinda de cualquier responsabilidad si los usuarios usan de manera ilícita la aplicación.
La compañía fue consultada por este medio y no ha dado respuesta a dicha situación.
Las quejas de los usuarios que se pueden leer refieren cambios discrecionales de las tarifas y los retrasos en sus unidades.
Por Everardo Martínez
PAL