Dependiendo del parentesco, los bienes y las circunstancias, realizar la herencia en vida es una opción que muchas familias pueden tomar.
Las herencias siempre han sido un tema controvertido en las familias, por lo que mucha gente llega a optar por realizar una donación en vida.
Cabe destacar que en la herencia es necesario que la persona que realiza el testamento fallezca para que los destinatarios perciban la transmisión patrimonial, mientras que en el caso de la donación en vida, puede realizarse en cualquier momento deseado.
Diferencias entre herencia y donación en vida
Aunque no existe una respuesta ni consenso claro al respecto de si es mejor la herencia o la donación en vida, muchos expertos recomiendan la primera opción, puesto que el testamento es, por norma general, menos gravoso tanto para hijos como para padres.
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Las ventajas de la donación en vida es que constituye una transmisión tanto escalable como reversible. Puede hacerse de forma parcial, como cediendo la titularidad de una vivienda, pero reservando el usufructo en vida, algo recomendable para mayores de 65 años.
De esta forma, se pueden resolver los apuros económicos de los herederos durante nuestra vida.
En el caso de dinero, especialistas y abogados señalan que en reparticiones a hijos mayores de 21 años, por encima de 550 mil euros, es mejor una donación.
Por ejemplo, ir dando poco a poco la herencia, pero tener en cuenta que se toman las donaciones de los últimos tres años para determinar el tipo de impuesto a aplicar.
Al igual que las donaciones, las herencias también vienen sujetas a un impuesto, cuyo precio depende de la región en la que tenga lugar la transmisión.
Antes de realizar la donación o herencia en vida, es preciso atender principalmente a los impuestos que se deben pagar en cada una de las modalidades.
jos