AHORRO

Finanzas Personales: 5 habilidades que te ayudarán a ahorrar desde los 20 años

Comenzar a ahorrar a una temprana edad permite consolidar un hábito que se verá reflejado en la economía de los jóvenes a mediano plazo; te decimos cómo comenzar este reto

ECONOMÍA

·
Comienza tu proyecto de ahorro con objetivos a corto y mediano plazo. FOTO: Cuartoscuro Créditos: Foto: Cuartoscuro

Ser joven no es un impedimento para no ahorrar, de hecho se considera que entre a más temprana edad comencemos con este hábito con los años se facilitará el obtener una situación financiera estable e incluso poder contar con dinero extra para realizar alguna inversión o afrontar situaciones excepcionales.

Durante tu juventud es más sencillo adoptar la mentalidad adecuada respecto al tema y nos facilitará con los años ser vulnerables a las circunstancias externas que muchas veces son conducen a duros ajustes económicos. Una edad temprana brinda además la posibilidad de poder hacer crecer el ahorro ya que al contar con menos gastos, se puede destinar una mayor cantidad a este fin.

Incluso si ya se cuenta con un empleo desde antes de los 20 años, los gastos suelen ser menores y la posibilidad de destinar un mayor porcentaje de los ingresos al ahorro se facilita. Claro que no siempre existen las condiciones adecuadas, sin embargo, no es imposible. Por ello no hay excusa para no comenzar con este buen hábito y para que te sea más sencillo el proceso, te compartimos cinco habilidades que puedes dominar para convertir este objetivo en una realidad. 

5 trucos para ahorrar 

Un ahorrador se impone hábitos, así que tienes que comprometerte con ellos. FOTO: Cuartoscuro

Compromerse con el reto de aprender las cinco habilidades del ahorro es una cuestión de tiempo, constancia y disciplina, en una temprana es más sencillo asimilar los objetivos de ahorro y aunque el proceso sea lento no hay que desesperar. Hay que recordar que no hay necesidad de llegar a cumplir los 30 años para proponerse objetivos de ahorra, el tiempo apremia. Conoce los trucos del ahorro y aprende a dominarlo.

1.Fija metas tangibles

Piensa bien tus objetivos y planea la meta que vas a alcanzar; puede ser desde comprarte el celular que deseas o incluso independizarte, que este objetivo influya en tu ánimo y te motive a seguir con tus planes de ahorro. Conforme tus proyectos crezcan, y tu ahorro también, incluso podrías adquirir una motocicleta, un coche o irte de vacaciones a donde siempre deseaste. Estos objetivos te ayudarán a fijar tu meta de ahorro mensual, semanal o diaria. 

2.Crea tus propios hábitos 

Un ahorrador se impone hábitos, así que tienes que comprometerte con ellos; con tu objetivo o meta. De esto dependerá también tu actitud en esta tarea, ya que conforme veas los resultados, el ánimo crecerá y los objetivos se incrementarán. Trata de gastar menos en cosas innecesarias, persigue las ofertas compra realmente lo necesario cuando visites el súper. 

3.Proyecta tus retos de ahorro

Comienza con objetivos de ahorro a corto y mediano plazo. FOTO: Pixabay

Comienza con objetivos a corto y mediano plazo; divide tus egresos en categorías y plantéate reducir ciertos gastos que no siempre necesitas, incluso si lo crees necesario puedes eliminar por completo alguno de ellos, siempre y cuando no sean de primera necesidad para ti. Recuerda que esto solo será temporal, conforme pase el tiempo podrás volver a darte esos gustos.

4.Comienza a ahorrar para tu jubilación

Nunca es una temprana edad para ahorrar para tu jubilación, de hecho con el tiempo te darás cuenta que cuanto menos años tengas cuando inicies tu plan de ahorra para este fin, es mayor el margen de dinero con el que podrás jubilarte. Así sea una cantidad mínima, no pases por alto esta oportunidad. Si adoptas este hábito con el paso de los años tú mismo lo agradecerás. 

5.No te desanimes

Finalmente, debes tener siempre presente que no tiene que decaer tu ánimo si el margen de ahorro que te propusiste no logras alcanzarlo en algún momento, no siempre las circunstancias van a ser favorecedoras, pero recuerda retomar el impulso en cuanto tengas la menos oportunidad.