A partir de este año, las Administradoras de Fondos para el Retiro (afores) tendrán la obligación, por ley, de aplicar una menor retención de ISR a los trabajadores que tengan una negativa de pensión y reciban el ahorro que acumularon durante su vida laboral para el retiro.
Hasta 2014, el impuesto era de 20 por ciento, una tasa que la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente (Prodecon) calificó en su momento de “excesiva”.
Por ello, el ombudsman fiscal pugnó por reducirla y fue en 2015 cuando logró, a través de la Suprema Corte, que se redujera a entre 5 y 7 por ciento, en función de los ingresos que reciba el trabajador.
Hasta 2019, la menor tasa tenía el carácter de opcional. Es decir, las afores podían retener el ISR de 20 por ciento y el trabajador tenía el beneficio de acudir a Prodecon para tramitar la devolución del diferencial del impuesto, explicó Alejandro Ibarra, encargado de la Subprocuraduría de Asesoría y Defensa del Contribuyente de la institución.
En entrevista con El Heraldo de México, comentó que, a partir de 2020, esta modificación la aprobó la Cámara de Diputados en la Ley del ISR, por lo que las afores ya tienen la obligación de retener sólo entre 5 y 7 por ciento.
De 2012 al 20 de enero de este año, nueve mil 466 personas solicitaron a la Prodecon asesoría para que su afore les compensara los recursos que les corresponden por el diferencial del ISR.
En algunas ocasiones, la personas, en su mayoría de la tercera edad, tardaban hasta un año para ver solución a su problemática.
Macario Hernández es uno de ellos. Obtuvo una negativa de pensión, porque no alcanzó las mil 250 semanas cotizadas ante el IMSS que pide la ley para jubilarse.
Su afore entregó el ahorro que acumuló a lo largo de su vida laboral, pero le retuvo 20 por ciento derivado del gravamen.
A sus 67 años y tras sufrir un infarto cerebral, se enteró que la afore sólo debió retener un ISR de entre 5 y 7 por ciento. Acudió con la Prodecon para ser asesorado y, tras un año de litigio, recibió la compensación que le correspondía.
“La tasa de 20 por ciento desvirtuaba la naturaleza de los recursos que recibía el trabajador: ahorro para el retiro”, comentó Ibarra.
Dijo que desde que se publicó la miscelánea en 2015, los amparos se empezaron a resolver. Hasta el momento, la totalidad de las asesorías se resolvieron a favor del contribuyente.
“No hay un índice que dicte cuáles afores tienen más procedimientos, las que tienen el mayor número de trabajadores, son por las que vienen más, entre ellas PensiónISSSTE, Afore XXI Banorte y Citibanamex, pero eso no quiere decir que sean las peores, sino son de las que tienen más beneficiarios”.
De acuerdo con Ibarra, el tiempo para recibir el reembolso va de tres a cuatro meses, pero si la afore se niega, el juicio puede llegar hasta un año.
Los montos que se reclaman van de 80 mil a 900 mil pesos, porque la Prodecon esta topada por ley para atender mayores sumas.
Es una resolución favorable para el contribuyente, porque recupera más dinero de lo que ya ahorró y dispuso para tener una vida mejor en el futuro”, comentó Ángel García-Lascurain, presidente del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).
Para 2020, dijo el subprocurador de Prodecon, esperan atender más casos de ese tipo porque pese a que ya es obligatorio, es probable que el personal de las afores no esté enterado de los cambios aprobados por el Congreso.
[nota_relacionada id=826921 ]
Por Fernando Franco
lctl