Campeche, Tabasco, Chiapas y Veracruz, estados con vocación petrolera, registran una caída en su economía de hasta 17 trimestres consecutivos, debido al descenso en la producción de la materia prima, lo cual ha impactado en la generación de empleo y el consumo interno. Campeche es el estado más afectado.
Según el Indicador Trimestral de la Actividad Económica Estatal (ITAEE), la entidad suma 17 retrocesos trimestrales consecutivos, es decir, desde 2013, revelan datos del Inegi.
“La dependencia económica del estado a la minería petrolera (68.3 por ciento del Producto Interno Bruto —PIB— estatal) y la menor producción de este energético en los pozos de Cantarell explican el resultado”, argumentó Citibamex en su reporte “Crecimiento del PIB estatal 2017-2018”.
Este impacto se refleja en la caída del número de empleos enlistados en el IMSS. Las plazas registradas cayeron 5.3 por ciento en promedio anual en 2017, cuando a nivel nacional aumentaron 4.4 por ciento.
En lo que se refiere a ventas del comercio al por menor, los ingresos cayeron 7.2 por ciento en promedio anual, esto también en 2017, lo cual refleja un deterioro en la demanda local. Otro indicador del débil consumo, es la venta de autos ligeros. A agosto de 2017 (el último dato disponible), arrojó una caída de 10 por ciento.
Citibanamex explicó que el descenso en la producción del hidrocarburo ha afectado el desempeño de otros sectores vinculados a esta actividad en el estado, como la construcción, que retrocedió 8 por ciento en el primer semestre de 2017.
Por su parte, Tabasco y Chiapas sumaron un deterioro de su economía de siete trimestres, mientras que Veracruz hiló tres.
“Durante los últimos años, la economía de Tabasco se ha visto afectada por la menor producción petrolera (…) En el primer semestre de 2017 el deterioro económico estatal se profundizo, el PIB disminuyó 10 por ciento, la mayor caída a nivel nacional”, señaló Citibamex.
En el caso de Tabasco, la generación de empleo cayó 4.6 por ciento; las ventas al pormenor se contrajeron 8.55 por ciento, mientras que la venta de autos nuevos retrocedió 11.6 por ciento.
Citibanamex explicó que en Veracruz, aunque el sector primario y los servicios registran avances, éstos no fueron suficientes para compensar la caída de 6 por ciento de la industria: “este resultado se atribuye a la disminución de 9.7 por ciento de la producción de petróleo en la entidad”.
En el estado también se registró una ligera baja en el empleo formal y una contracción de 18.5 por ciento en la venta de vehículos ligeros. En 2017, la producción total de crudo cayó 9.56 por ciento en promedio anual.
Sin embargo, Miguel Messmacher, subsecretario de la Secretaría de Hacienda, aseguró que la industria petrolera empieza a dar un impulso adicional a la economía mexicana.
Destacó que desde finales de 2016 se empezó a estabilizar la producción y señaló que se espera que en los próximos meses la plataforma de Pemex empiece a generar un monto de producción adicional.
POR FERNANDO FRANCO
Sábado 14 de Diciembre de 2024