Donald Trump, presidente de Estados Unidos, impondrá aranceles al acero y aluminio, de 25 y 10 por ciento, respectivamente.
Su argumento es que es un trato justo para la Unión Americana de parte de los mayores productores del mundo.
Además prometió que reconstruirá a la industria de su país, la cual ha sido tratada injustamente por décadas.
La propuesta del presidente Trump se da en plena negociación del Tratado Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), lo que podría desatar una guerra comercial y afectar las reglas del sector automotriz.
“La industria del acero espera que México sea excluido de la sección 232 (una fracción aplicada a las lavadoras y paneles solares), por lo que hace a las exportaciones mexicanas de productos siderúrgicos a ese país, a fin de evitar una guerra comercial que afectaría a las cadenas productivas de ambos países”, advirtió la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero (Canacero).
En caso de que México esté incluido entre los medidas para cobrar aranceles a las exportaciones de acero y aluminio se espera que se responda de forma recíproca e inmediata, aseguró el organismo minutos después del anuncio de Trump.
“Por primera vez en mucho tiempo tendrán protecciones”, dijo el presidente de EU.
Según la Canacero, en los últimos 10 años, las exportaciones estadounidenses de acero a México aumentaron 58 por ciento, pasando de seis mil 200 millones de dólares en 2008 a nueve mil 800 millones de dólares el año pasado.
En 2017, el superávit comercial de EU con México en acero y productos de acero alcanzó tres mil 400 millones de dólares, lo cual muestra lo importante que es el mercado mexicano para la industria del acero de EU.
“Si se pone arancel a la materia prima, pues le va afectar de alguna forma a la regla de origen.
Por eso fue que los negociadores fueron llamados a Washington”, dijo Moisés Kalach, coordinador general del Consejo Consultivo Estratégico de Negociaciones Internacionales (CCENI).
“Por tener un acuerdo comercial con EU consideramos que la medida (de imponer aranceles al acero y aluminio) no se justifica”, dijo Eugenio Salinas, Coordinador del Cuarto de Junto.
Estados Unidos registra un superávit de dos mil millones de dólares en el comercio del acero con Canadá, dijo Chrystia Freeland, ministra de Relaciones Exteriores del gobierno canadiense.
“Canadá compra más acero de Estados Unidos que cualquier otro país del mundo, y estas compras representan 50 por ciento de las exportaciones estadounidenses de este sector”, comentó la funcionaria.
Por su parte, de EU viajó a Ciudad de México una manta con más de mil firmas de granjeros y productores agrícolas, quienes se oponen a la cancelación del TLCAN y piden abrirse al comercio de Asia, especialmente a China.
“Todos los agricultores coinciden en que el TLCAN ha sido muy positivo para el sector y ha beneficiado a todos sus miembros”, dijo Brian Kuehl, director ejecutivo de Agricultores en Favor del Libre Comercio.
POR ENRIQUE HERNÁNDEZ
“La industria del acero espera que México sea excluido de la sección 232 (una fracción aplicada a las lavadoras y paneles solares), por lo que hace a las exportaciones mexicanas de productos siderúrgicos a ese país, a fin de evitar una guerra comercial que afectaría a las cadenas productivas de ambos países”, advirtió la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero (Canacero).
En caso de que México esté incluido entre los medidas para cobrar aranceles a las exportaciones de acero y aluminio se espera que se responda de forma recíproca e inmediata, aseguró el organismo minutos después del anuncio de Trump.
“Por primera vez en mucho tiempo tendrán protecciones”, dijo el presidente de EU.
Según la Canacero, en los últimos 10 años, las exportaciones estadounidenses de acero a México aumentaron 58 por ciento, pasando de seis mil 200 millones de dólares en 2008 a nueve mil 800 millones de dólares el año pasado.
En 2017, el superávit comercial de EU con México en acero y productos de acero alcanzó tres mil 400 millones de dólares, lo cual muestra lo importante que es el mercado mexicano para la industria del acero de EU.
“Si se pone arancel a la materia prima, pues le va afectar de alguna forma a la regla de origen.
Por eso fue que los negociadores fueron llamados a Washington”, dijo Moisés Kalach, coordinador general del Consejo Consultivo Estratégico de Negociaciones Internacionales (CCENI).
“Por tener un acuerdo comercial con EU consideramos que la medida (de imponer aranceles al acero y aluminio) no se justifica”, dijo Eugenio Salinas, Coordinador del Cuarto de Junto.
Estados Unidos registra un superávit de dos mil millones de dólares en el comercio del acero con Canadá, dijo Chrystia Freeland, ministra de Relaciones Exteriores del gobierno canadiense.
“Canadá compra más acero de Estados Unidos que cualquier otro país del mundo, y estas compras representan 50 por ciento de las exportaciones estadounidenses de este sector”, comentó la funcionaria.
Por su parte, de EU viajó a Ciudad de México una manta con más de mil firmas de granjeros y productores agrícolas, quienes se oponen a la cancelación del TLCAN y piden abrirse al comercio de Asia, especialmente a China.
“Todos los agricultores coinciden en que el TLCAN ha sido muy positivo para el sector y ha beneficiado a todos sus miembros”, dijo Brian Kuehl, director ejecutivo de Agricultores en Favor del Libre Comercio.
POR ENRIQUE HERNÁNDEZ