La Comisión Reguladora de Energía (CRE) aprobó hoy en su sesión del órgano de gobierno aumentar el porcentaje de etanol como oxigenante de gasolinas de 5.8% a 10%. Esto aplicará para la zona denominada “resto del país”, que excluye a las áreas metropolitanas del Valle de México, Guadalajara y Monterrey.
Gracias a la modificación de la NOM- 016, a partir de la publicación en el Diario Oficial de la Federación (prevista para la semana que viene) en México se podrán comenzar a utilizar gasolinas E10, es decir con 10% de etanol como oxigenante, tal y como la que se comercializa en Estados Unidos.
De acuerdo a la CRE esto va a facilitar la entrada de producto importado desde el vecino del norte, pues actualmente el combustible que se comercializa en México tiene características diferentes. “Esta medida elimina barreras a la entrada de nuevos participantes y favorece la apertura de los mercados de petrolíferos, dando un paso más en la implementación de la Reforma Energética”, indicó la CRE a través de un comunicado.
Entre las ventajas que ofrece contar con una mayor porcentaje de etanol en las gasolinas está menos emisiones contaminantes, pues el combustible “etanolado” cuenta con ocho veces menos partículas de azufre que las gasolinas adicionadas con oxigenantes MTBE, que son las que se emplean actualmente en México.
Asimismo, la producción del etanol es más económica lo cual se traduce en un menor costo de las gasolinas. El ahorro puede llegar a 20 centavos por litro de gasolina, o en otras palabras entre ocho y diez pesos menos por tanque de gasolina.
La introducción de los combustibles E10 en las áreas metropolitanas de Guadalajara, Monterrey y el Valle de México aún no se hace, pues se están haciendo estudios para evaluar el impacto ambiental de este tipo de energético en ciudades con estas características ambientales, población y parque vehicular.
Además de aumentar el uso de etanol en las gasolinas, la modificación de la NOM- 016 también flexibiliza los controles que se hacen a los distribuidores y almacenadores de combustibles en el país.
Ahora, las pruebas que se realizan a los combustibles para determinar que cumplan con las especificaciones de la norma mexicana se harán cada seis meses, en lugar de por cada lote de combustible. Esto puede resultar en un ahorro para los permisionarios de más de 800 mil pesos al año.
Por Ender Marcano
Miércoles 4 de Diciembre de 2024