El periodista y colaborador de El Heraldo de México, Juan Antonio de Labra, presentó el libro “Mi verdad en los toros, Memorias de un apoderado” de la carrera del venezolano Rafael Báez, quien llevó los destinos del torero regiomontano Eloy Cavazos, durante una ceremonia en el restaurante Arroyo, en la CDMX.
Ante casi un centenar de familiares, amigos y aficionados a la fiesta brava, De Labra recordó el legado del apoderado, quien durante a lo largo de 45 años de relación, llevó a Cavazos a ser una de las últimas figuras del toreo mexicano.
“Es un libro llena de vivencias. Don Rafael Báez sacrificó a su familia por cumplir un sueño y convertir a Eloy Cavazos en una figura del toreo”, dijo De Labra.
De hecho, Eloy toreó 1908 festejos en ruedos mexicanos, así como de Sudamérica y del Viejo Continente, a los largo de más de cuatro décadas desde que tomó la alternativa el 28 de agosto de 1966 hasta el día de su retiro el 16 de noviembre de 2008.
Él es último torero azteca en abrir la Puerta Grande de Las Ventas, de Madrid, tras cortar dos orejas al toro “Azulejo” del hierro de Adelaida Pérez Tabernero, la tarde del 27 de mayo de 1972.
La publicación narra anécdotas, vivencias y la biografía del apoderado en el mundo de los toros.
“Debo agradecer a mi esposa para poder escribir este libro durante más de dos años y en este libro se plasma lo que deben de hacer los apoderados para apoyar las carreras de los toreros y no robarles”, dijo Báez, entre las risas de los presentes.
Eloy Cavazos asistió al evento en compañía de su esposa e hijos, y agradeció todo lo que hizo Báez en su carrera.
“Fui el más mentiroso del mundo. A don Rafa siempre le mentí desde que le decía que me levantaba a las 4:00 de la mañana para ir a correr, que subía el Cerro de la Silla desde esa hora. Pero si no es gracias a él, no habría podido ser lo que fui en el mundo de los toros”, dijo Cavazos, quien en 1977 toreó 127 festejos, un récord para un matador de toros de nuestro país.
“Si tuviera la oportunidad de volver a nacer, volvería a ser torero y volvería a elegirte a ti, Don Rafa como apoderado”, concluyó Cavazos.
Por Héctor Juárez Cedillo
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