Mercedes volvió a dar un golpe de autoridad sobre la mesa, y metió a sus dos coches en la primera fila de la parrilla en el circuito de Albert Park de Melbourne, durante la prueba de clasificación para el Gran Premio de Australia.
Lewis Hamilton estuvo impecable y dejó sin aliento a Ferrari, al imponer un récord de vuelta (1’20’486) para cosechar su sexta pole consecutiva en Australia, y la octava en un mismo GP, para igualar al alemán Michael Shumacher (Suzuka) y al brasileño Ayrton Senna (Imola), un logro más a su brillante palmarés.
Parece que la decidida actitud del británico inspiró a Valtteri Bottas, que rodó con mucho ritmo, y a escasas milésimas de segundo de su compañero, lo que hace suponer que en esta temporada pretende dejar de interpretar el papel de fiel escudero.
El SF90 de Ferrari no pudo confirmar las expectativas que había generado en la pretemporada de Barcelona, y por ahora está a unas cuantas décimas de segundo de distancia del W10 de Mercedes.
Sergio Pérez sacó su experiencia, acabó en décimo lugar, y venció a Lance Stroll, su vecino de garaje, que había hecho mejores tiempos en todos los ensayos previos.
Por JUAN ANTONIO DE LABRA
Mercedes con el 1-2
LAS FLECHAS PLATEADAS largarán primeros en el circuito albert park; checo lo hará desde la décima posición