El estado de la cancha del Estadio Azteca es vigilado de cerca por la NFL, con apoyo de su oficina en México, de cara al juego entre Rams y Chiefs del 19 de noviembre próximo.
Los problemas de adaptación del césped híbrido que se instaló el 20 de julio tiene la atención de la liga de futbol americano profesional, pues su condición podría incidir en el desarrollo del partido.
Según Arturo Olivé, director de NFL México, semanalmente se monitorea el campo.
Estamos muy en contacto con el Estadio Azteca y su equipo de trabajo. La cancha va avanzando muy bien, hay que darle tiempo, la ventana FIFA ayudó y conforme bajan las lluvias esperamos que esté en mejores condiciones”.El campo de juego es esencial para el partido, según explicaron jugadores de la Liga de Futbol Americano Profesional de México (LFA). “Si el pasto está flojo, no te permite hacer movimientos oportunos, hay que tener más cuidado en la pisada para cambiar de dirección o cargar un oponente”, comentó Ricardo Quintana, quarterback de los campeones Mexicas. “En un pasto en condiciones no tan buenas no hay la misma tracción, te puedes resbalar y puede haber lesiones, por eso es muy importante que la cancha esté bien”, agregó Óscar Meza Matus, liniero defensivo de los Raptors. Por KATYA LÓPEZ