La nadadora mexicana Liliana Ibáñez cierra la mejor temporada de su vida. Con seis nuevos récords mexicanos y un 6º sitio en 100m libres de la Copa del Mundo de Singapur, la mexicana logra una actuación histórica en un evento al que no siquiera querían llevarla.
“Fue muy complicado. Me decían que no tenía el nivel que me desacreditaría; algunas personas no están en el día a día ni entienden lo importante de competir al tú por tú. No fue la Conade. Fue la Comisión Técnica (de la Federación Mexicana de Natación). Al final el trabajo duro pagó y estoy muy feliz de callar bocas, pero esto fue muy delicado, pudieron destruir el plan de mi preparación, así que si en 2019 no le van a ayudar al menos me dejen trabajar”, expresó Ibáñez López, quien llegó la noche de este lunes a la CDMX.
La experiencia fue enriquecedora pues además recibió consejos de las mejores del mundo, como: la húngara Katinka Hossu, Campeona Mundial; la neozelandesa Ranomi Krodomwijojo, triple Campeona Olímpica; y la holandesa Femke Heemskerk Campeona Olímpica.
“Yo me tiraba a morir en cada prueba y las demás competidoras percibían y me gané su respeto y ahora hasta me escriben que ojalá nos veamos en el Mundial. Yo pensaba en que con todos sus logros ellas más bien pensaban en cómo ayudarme”, compartió.
En las próximas horas, la estudiante de la Universidad Texas A&M sabrá si contará o no con los apoyos para asistir al Campeonato Mundial de Curso Corto que se realizara del 11 al 16 de diciembre en Hangzhou, China. “No hemos tomado una decisión porque no le toca a mi. Si me preguntan, yo muero por nadaren el Mundial”, confesó.
Aún cuando las decisiones técnicas estuvieron por afectar su rendimiento, Liliana llega a México para recibir este martes la condecoración militar al Mérito Deportivo 2018, junto con diez atletas-militares más. El presidente Enrique Peña Nieto entregará dichas insignias.
Por Katya López