Daniel Ricciardo sorprendió a todos al ganar la pole del Gran Premio de México, cuyos tres ensayos habían pertenecido a su compañero, Max Verstappen, que se perfilaba a romper el récord de Sebastian Vettel como el piloto más joven de la historia en ganar una clasificación.
Pero eso no sucedió gracias a la impecable vuelta con la que el australiano abrochó la Q3, que detuvo el reloj en 1’14’’759, y dejó a Max a una mínima diferencia de 26 milésimas de segundo, para que Red Bull consiguiera un espectacular doblete, el primero de 2018.
La felicidad de Ricciardo era inmensa, sobre todo porque este año no ha sido fácil para él desde que anunció que el año entrante correrá para Renault, que todavía sigue siendo el motorista de Red Bull, y cuya larga relación de trabajo concluye a final de esta temporada, al haber firmado contrato para utilizar unidades de potencia fabricadas por Honda.
Por otra parte, quedó de manifiesto que el agarre mecánico del RB14, producto del magnífico diseño de su chasis, supera a Mercedes y Ferrari en este circuito donde mañana largarán delante de los bólidos de Lewis Hamilton y Vettel, que compartirán la segunda fila de la parrilla de salida.
El doblete de Red Bull le confiere un aspecto muy interesante a la carrera, ya que no será fácil vencer a sus pilotos, y mientras Hamilton sólo necesita unos cuantos puntos para convertirse en campeón del mundo, y tendrá que ser cauteloso, no se sabe si su raza competitiva lo obligue a rifársela con los de adelante o si preferirá contenerse para no tener ningún contratiempo que lo deje fuera de combate.
En contraparte, Vettel está obligado a ganar la carrera y dejar lo más lejos posible a Hamilton para impedir que el británico se corone como campeón del mundo. De tal suerte que estos elementos harán del Gran Premio de México un acontecimiento muy emocionante para un público que hoy hizo un entradón en el autódromo capitalino.
Posiciones del resto
Valtteri Bottas quedó detrás de Vettel, y Kimi Räikkönen atrás de éste, lo que implica que estas posiciones alternadas también pueden incidir en lo que ocurra adelante. Después de que las tres escuderías dominantes se repartieron los seis primeros lugares de la clasificación, arrancarán los dos coches de Renault, que metieron a la Q3 gracias a la habilidad de Niko Hulkenberg y Carlos Sainz, que hicieron un gran papel en la clasificación, manteniendo las expectativas que habían establecido en el reciente Gran Premio de Estados Unidos.
Asimismo, los dos coches de Sauber, que están motorizados por Ferrari, partirán en noveno y décimo lugar, con el prometedor Charles Leclerc a la cabeza. Y este elemento representa otro atractivo añadido para la carrera.
Arrancan con hiperblandos
El detalle fino es que, por obligación reglamentaria, los diez primerosf deberán largar con los neumáticos hiperblandos usados (los que emplearon en la Q2), y que son unas gomas que degradan mucho y duran pocas vueltas, motivo por el que la estrategia de parada en boxes para cambiarlas será decisiva, así como procurar no perder posiciones en el regreso a pista.
Checo Pérez partirá 13
La estrategia de Force India desconcertó un poco, ya que en la Q2 salieron a pista con el compuesto superblando que no les permitió quedar entre los diez primeros, y a falta de unos tres minutos del término de esta etapa montaron los ultrabandos (que son más veloces), pero no tuvieron el agarre necesario para igualar los tiempos establecidos por los más rápidos.
De esta manera, Esteban Ocon largará en decimoprimer lugar, con la posibilidad de elegir neumáticos nuevos (que posiblemente sean los ultrablandos), mientras que Checo Pérez terminó decimotercero, por detrás de Fernando Alonso, al que tendrá que superar en las primeras vueltas de la carrera para más tarde lanzarse a por Ocon, pues no le agradaría que el francés le gane aquí en México.
Desde luego que no es un lugar muy halagüeño para comenzar la remontada, pero Checo es un especialista en cuidar las gomas, además de que la probabilidad de lluvia de esta noche tal vez modifique las circunstancias de la pista.
Esta circunstancia podría favorecer la estrategia a la que Force India está apostando: aprovechar el rendimiento de las gomas nuevas para detenerse en boxes vueltas más tarde que el resto de los de adelante, y tratar de acortar distancias.
Por otra parte, correr en casa, delante de todo su público, será un elemento de motivación que debe impulsar al piloto mexicano a tratar de obtener su mejor resultado en el Gran Premio de casa, que es séptimo. El reto es complicado.
Por Juan Antonio de Labra