Por: Juan Antonio de Labra/El Heraldo de México
Lewis Hamilton estaba en una nube. No se lo podía creer. Había igualado en 68 poles a uno de los pilotos más contundentes de la historia: Michael Schumacher.
Y lo consiguió durante la clasificación del Gran Premio de Bélgica, donde el campeonato de Fórmula 1 retoma la actividad tras el periodo de vacaciones.
De antemano se sabía que el circuito de Spa-Francorchamps iba a favorecer a Mercedes, y aunque Ferrari se mostró fuerte en las pruebas libres, Hamilton impuso un récord de velocidad al terminar su mejor vuelta con un tiempo de 1:42.553, seguido de Sebastián Vettel, que quedó a poco más de dos décimas de segundo, y de Valtteri Bottas, que acabó a medio segundo del británico.
Lewis quedó posicionado para ir por una victoria muy significativa, que le permita acortar distancia con Vettel, pero el resultado dependerá de la estrategia y del clima, que en esta pista cuenta mucho por tratarse de una zona boscosa en la que suele llover, circunstancia que aportaría una mayor emoción a la carrera.
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La pelea en la cumbre entre Hamilton y Vettel, que acaba de firmar tres años más con Ferrari, también tuvo su versión en la media tabla, donde “el resto de los mortales”, como se les dice coloquialmente, trataron de ser competitivos.
La rivalidad entre Esteban Ocon y Sergio Pérez vivió momentos de tensión, ya que el francés corrió con más precisión que el mexicano en las pruebas libres, pero no pudo superarlo en la clasificación, como suele ser habitual.
Así que Checo arrancará desde la octava plaza y su coequipero un lugar atrás.
Vamos a ver en qué termina esta batalla. Los dos ya saben que es preciso no tocarse y evitar algún contratiempo que arroje un resultado negativo para Force India.
Otro de los alicientes para este gran premio, el decimosegundo del campeonato, es la euforia de los aficionados holandeses y belgas con su héroe: el impetuoso Max Verstappen, que acabó en quinto lugar y no dudará en tratar de cazar a Räikkönen con el afán de encaramarse en el podio.
Fernando Alonso tuvo algunos problemas de potencia. Nada nuevo. Sin embargo, partirá decimoprimero con la ventaja de calzar neumáticos nuevos, y a la espera de conseguir puntos en un circuito que será muy exigente con el desastroso motor Honda que alimenta al MCL32 de piloto español.
Para Williams fue una jornada sin brillo, ya que Felipe Massa, que reaparece tras haber estado enfermo, estrelló su coche y tampoco el novato Lance Stroll pudo hacer nada. Los coches blancos saldrán desde los lugares 16 y 18 de la parrilla, respectivamente.
En cambio, Renault tuvo un buen repunte, pues consiguió meter a sus dos pilotos en la Q3. En esta carrera, que cumple medio siglo de vida, Niko Hulkenberg y Jolyon Palmer serán rivales directos de los coches de Force India.